Andy Schleck ganó con el permiso de Alberto Contador la etapa con final en el alto del Tourmalet tras atacarse entre los dos sin que ninguno pudiera despegar a su rival, en una demostración de su gran igualdad en la montaña. Por eso se jugarán el triunfo final en el Tour mañana en la crono de 52 kilómetros de Burdeos, con favoritismo para el madrileño por los ocho segundos de ventaja y porque es mejor especialista contra el reloj.

En la segunda batalla también se confirmó la igualdad entre Samuel Sánchez y Denis Menchov. El de Rabobank no se conformaba con la tercera posición, decía incluso que aspiraba a la victoria en una entrevista publicada ayer por «L'Equipe». Así, cuando atacó Andy Schleck y Contador se enganchó a su rueda, el ruso afincado en la localidad navarra de Gorraiz intentó seguirles, pero vio que los dos están un punto por encima de todos los demás y se limitó a pensar en la tercera plaza. Así se puso a rueda de Samuel, que a pesar de sufrir una grave caída en la parte inicial, fue capaz de distanciarlo en el último kilómetro y arañarle otros ocho segundos. Mantiene la tercera plaza con 21 sobre Menchov y tendrá sus referencias mañana.

Porque el Tourmalet no hizo más que confirmar las jerarquías de este Tour y en toda la carrera se ha visto que Andy Schleck y Contador, por una parte, y Samuel y Menchov están muy igualados, y entre ellos se jugarán mañana el orden del podio.

El luxemburgués se marcaba el Tourmalet como última oportunidad de distanciar a Contador, intentó además atacarle desde lejos para sacar la máxima distancia, pero el madrileño pudo seguir su rueda. Lo hizo sin excesos, porque también intentó atacar a falta de cuatro kilómetros y Schleck respondió con facilidad. A partir de ahí, Contador se limitó a seguir su estela y no le disputó la victoria para terminar de reconciliarse.

La lógica de la crono

Además, si la lógica se impone en la crono, lo más probable es que la diferencia final entre ambos supere los 39 segundos que Contador sacó a Schleck tras saltársele la cadena, con lo que nadie podrá reprocharle que su triunfo se deba a lo sucedido camino de Bagneres de Luchon..

La misma lógica invita a pensar que Menchov arrebatará la tercera plaza a Samuel, pero el asturiano quiere dar a Euskaltel el primer podio de su historia y su actuación alcanzó ayer un mérito superior tras sufrir una fuerte caída en la parte inicial de la etapa, que se saldó con un traumatismo torácico y dolores en el pecho y clavícula derecha.

Todo Euskaltel se quedó a esperarle y Contador ordenó al Astana que no tirara para permitir que se reincorporara al pelotón. También el madrileño dio permiso a Sastre para ir en una fuga sin sentido que le hizo perder cinco plazas en la general.

Estaba ya formada la escapada del día con Flecha y Boasson Hagen (Sky), Koren (Liquigas), Kolobnev (Katusha), Burghardt (BMC), Pauriol (Cofidis) y Rubén Pérez, que volvió a dar presencia a Euskaltel en la fuga. Sastre se marchó en el llano antes de la primera subida al Marie Blanque con su compañero Konalovas, pero éste se quedó y el ganador del Tour en 2008 se pasó en tierra de nadie toda la etapa hasta que fue atrapado por el grupo poco antes de la ascensión final al Tourmalet.

Saxo Bank mejoró su nivel de los últimos días y endureció la carrera hasta que Fulgsang dio su último relevo y Andy Schleck lanzó su ataque para atrapar al último de los supervivientes de la escapada del día, Kolobnev, y subir con Contador a rueda los últimos diez kilómetros.

Cambios en el Top Ten

Los cinco primeros demostraron que ningún otro amenazará sus posiciones y, a partir de ahí, los grandes triunfadores de la jornada fueron Hesjedal, Kreuziger y Horner, que afianzaron sus opciones de acabar en el Top Ten por delante de los Caisse d'Epargne Luis León Sánchez y Rubén Plaza, que quedan a demasiada distancia de corredores que van bien contra el crono.

El conjunto navarro no pudo cumplir con ninguno de los objetivos marcados para la etapa. Los dos hombres que han disputado la general no se colaron en el Top Ten, Moreau no pudo arrebatar la montaña a Char- teau (Bouygues) y además Radio Shack amplió su ventaja en la lucha de la general por equipos.

Hoy se disputa la antepenúltima etapa entre Salies de Béarn y Burdeos, 198 kilómetros, llamada a acabar al sprint si no prospera ninguna escapada.