Sarkozy asume la muerte del rehén tras al ataque frustrado a Al-Qaeda
Nicolas Sarkozy confirmó ayer oficialmente, mediante una alocución televisada, la muerte del rehén francés Michel Germaneau, que se produjo tras un operativo conjunto de tropas francesas y mauritanas contra Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI). La gestión de este secuestro por parte de París puede provocar una agria polémica en el Estado francés. AQMI mantiene secuestrados a dos catalanes.
GARA
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, confirmó ayer la muerte del rehén francés Michel Germaneau en el Sahel, reivindicada por Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), que calificó de «acto bárbaro, odioso»
«Condeno este acto bárbaro, odioso, que acaba de provocar una víctima inocente que dedicaba su tiempo a ayudar a la población local», declaró Sarkozy en un alocución televisiva en la que denunció «este asesinato a sangre fría».
«Queridos compatriotas, este crimen cometido contra Michel Germaneau no quedará impune», prometió Sarkozy.
El líder de AQMI, Abu Mussab Abdel Wadud, anunció en un mensaje difundido el domingo por la noche a través de la televisión Al-Jazeera que su grupo ejecutó el sábado a Germaneau, secuestrado en Níger en abril, «para vengar a nuestros seis hermanos muertos en la operación que lanzó Francia», junto a las fuerzas de seguridad mauritanas contra una unidad de Al-Qaeda.
El Estado francés participó el jueves en un operativo del Ejército mauritano contra una base de AQMI en Mali. El ataque provocó siete muertos entre los insurgentes islamistas.
«El campamento destruido era susceptible de ser el lugar de detención» de Germaneau, trató de justificar Sarkozy. Sin embargo, las informaciones que manejaba París se demostraron erróneas en este aspecto, ya que el rehén francés no se encontraba en ese lugar.
De este modo, diversos analistas destacaron que el intento de rescate frustrado podría complicar la situación de Germaneau y de los catalanes Albert Vilalta y Roque Pascual, secuestrados en noviembre de 2009 en Mauritania y que supuestamente se encuentran en manos de otra célula de AQMI. Finalmente, la franquicia de Al-Qaeda mató al rehén francés.
El pasado 11 de julio AQMI difundió un mensaje dirigido al Estado francés en el que amenazaba con matar a Michel Germaneau en un plazo de quince días -que acababa ayer- si París no respondía favorablemente a sus exigencias.
Críticas al Gobierno
La gestión de este asunto por parte de Sarkozy ha provocado ya críticas en el Estado francés. Así, Olivier Thomas, alcalde por el PS de Marcoussis (Île-de-France), localidad en la que residía Germaneau, destacó que «hay zonas oscuras que deben ser aclaradas».
«A pesar de lo que ha dicho el presidente de la República sobre el deber de intervenir, en este asunto existen zonas oscuras que soy incapaz de comprender», declaró Thomas a la emisora LCI.
«Me parece bien y justo que se declare la guerra al terrorismo. Al mismo tiempo, poner en peligro la vida de un francés que ha ido allí por causas humanitarias es un decisión terrible. Me gustaría que me dijesen cómo, por qué, en qué condiciones y quién ha decidido estas operaciones militares, con el riesgo que suponen para el rehén y con las consecuencias que ha tenido», añadió Thomas, que el jueves se entrevistará con el primer ministro, François Fillon.
El Ayuntamiento de Marcoussis ha convocado una concentración silenciosa para el jueves a las 19.00 en esta localidad cercana a París.
La primera secretaria del PS, Martine Aubry, por su parte, señaló que «las espantosas condiciones de la detención y ejecución de Germaneau deben ser aclaradas. Pero hoy, nuestro pensamiento, como el de todos nuestros compatriotas, se dirigen hacia sus allegados y su familia».
Un electo malí confirmó a France Presse que Germaneau fue decapitado tras el fracaso de la operación franco-mauritana.
Con un cadáver no localizado, el asunto del rehén francés Michel Germaneau mantiene zonas oscuras, mientras algunas fuentes señalan que su muerte se remonta a hace ya varias semanas.
Desde el secuestro, aparece una contradicción sobre la fecha del rapto. Para las autoridades francesas, este hombre de 78 años que trabajaba para una pequeña organización humanitaria fue secuestrado el 19 de abril al norte de Níger. AQMI, por su parte, afirma que lo capturó el 22 de abril. Esta diferencia podría explicarse por un secuestro realizado por bandidos que vendiesen tres días más tarde a su presa a AQMI, una práctica corriente en esta región.
Michel Germaneau fue secuestrado con un amigo, el copresidente de la asociación humanitaria para la que trabajaba, Abidine Ouaghi, de nacionalidad argelina. El papel de este argelino es confuso, ya que ha sido inculpado en Níger de complicidad en el secuestro.
El 14 de mayo, los captores difundieron una prueba de vida a través de un testimonio sonoro acompañado de una foto del rehén francés. Pero a falta de indicaciones, el misterio se cierne sobre la fecha de la grabación: algunos días o varias semanas después del rapto.
Con el mensaje, los captores, como hicieron con otros rehenes en el pasado, reclamaron la liberación de presos. Y añadieron que aportarían precisiones «al negociador», lo que parece indicar la idea de que existía un contacto, al menos indirecto, con el Estado francés. Si hay que creer a las autoridades francesas, no había contacto alguno. Philippe RATER (AFP)
El ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, aseguró ayer que Madrid sigue trabajando «con determinación y compromiso» para liberar a Albert Vilalta y Roque Pascual.