Steven Soderbergh acostumbra a alternar el cine comercial con el experimental, ya que le gusta explorar soluciones visuales en su faceta de director de fotografía, oculto bajo el seudónimo de Peter Andrews. En «The Girlfriend Experience», hace un ejercicio esteticista, a fin de dar un tratamiento diferente a la historia convencional de una «escort» o chica de compañía de alto standing.

La protagonista no se limita a ofrecer sólo sexo a cambio de su elevada tarifa, sino que promete a sus clientes la experiencia anunciada en el título, haciéndoles sentir como si ella fuera realmente su novia. La gente paga por no sentirse sola, y quien cobra por sus servicios de relaciones tampoco está a salvo de la soledad. En la mirada de Soderbergh hay un poso existencial que conecta con el cine de Antonioni o de Bergman.

La sorprendente Sasha Grey se aleja de su pose de musa intelectual del porno a medida que aparece con mayor asiduidad en series de televisión y películas no calificadas «X». Figura en la nueva temporada de «Entourage», y ha rodado como actriz dramática a las órdenes de Dick Rude en «Quit». Puede que su consagración llegue con «I Melt With You», una realización de Mark Pellington en la que se las verá con el curtido Rob Lowe. Ya no va a necesitar de la excusa del sexo para salir en pantalla.