Los convocantes de la marcha de Bilbo presentan una ruta alternativa a la de Lakua
El grupo de ciudadanos que ha convocado una manifestación, a las 12.30 de este viernes en Bilbo, en defensa de los derechos de Euskal Herria, además de denunciar el recorrido impuesto por Interior de Lakua, ha presentado otro alternativo que parte desde la plaza Zabalburu.GARA |
El grupo de ciudadanos que ha convocado, para este viernes en Bilbo, la manifestación en defensa de los derechos de Euskal Herria emitió ayer un comunicado por el que informa de que ha presentado un nuevo recorrido ante el cambio de trayecto que impuso el viernes el departamento que dirige el consejero Rodolfo Ares.
En una nota de prensa, los convocantes mostraron ayer su desacuerdo con el recorrido impuesto por Interior de Lakua. De entrada, censuran que «resulta significativo que éste fuera publicado en los medios de comunicación 24 horas antes de ser comunicado al interesado».
De Zabalburu al Ayuntamiento
Pero, sobre todo, destacan que el recorrido fijado por Lakua, además de estar alejado del centro de la capital vizcaina, «desfigura el sentido de la propia manifestación y deja en evidencia un indisimulado objetivo político: arrinconar el derecho de manifestación y que ésta tenga el mínimo de repercusión posible».
Recuerdan, además, que «más de la mitad del recorrido impuesto por la Ertzaintza está levantado por las obras del tranvía». Así, en la nota emitida señalan que durante la comparecencia en la que anunciaron la movilización, uno de sus objetivos era denunciar la conculcación de derechos, incluido el de manifestación, y critican que «esta resolución del PSOE evidencia que en la lucha por el respeto de los derechos civiles y políticos aún falta mucho camino por recorrer».
Ahora, los convocantes han presentado otro recorrido que «evita los «problemas técnicos» alegados por la Consejería de Interior»; uno alternativo que arranca desde la plaza Zabalburu y finaliza ante el Ayuntamiento, pero evitando los problemas de la Plaza Circular.
Para los convocantes el cambio de Lakua «deja en evidencia un indisimulado objetivo político: arrinconar el derecho de manifestación y que ésta tenga el mínimo de repercusión posible».