La secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez, defendió la gestión del Gobierno español del secuestro de los cooperantes catalanes y, ante las críticas, incluidas las que hizo el presidente francés, Nicolas Sarkozy, replicó que las gestiones diplomáticas y de inteligencia han sido las que han permitido que seis de los siete europeos secuestrados por Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) hayan sido liberados.

Soraya Rodríguez eludió en todo momento confirmar las negociaciones llevadas a cabo con Al-Qaeda y que, según la prensa, habrían consistido en el pago de un rescate millonario y en la puesta en libertad de un sospechoso detenido en Mauritania. En esta línea, insistió en que Madrid ha hecho en este caso «lo que todo gobierno hace cuando la vida y la integridad de sus nacionales está en juego: trabajar para garantizar su seguridad y en este caso, conseguir su regreso a casa lo antes posible, como así han estado trabajando otros gobiernos europeos», comparó.

El «ejemplo» francés

La responsable española aprovechó su intervención para lanzar una puya al propio Sarkozy, al recordar que «así hemos conseguido que de siete europeos secuestrados seis hayan podido regresar a su casa y lamentablemente uno haya sido asesinado». Rodríguez se refería así al caso del rehén francés, Michel Germaneau, ejecutado por AQMI a finales de julio después de que el Ejército francés lanzara un operativo contra la organización islamista en Mali.

Respondía así al presidente francés, quien señaló la víspera que «la única estrategia no debe consistir en pagar rescates y acceder a liberar prisioneros a cambio de desafortunados inocentes». El presidente francés llegó a reivindicar como «decisiva» la operación militar que acabó con la muerte del rehén francés Germaneau.

Rodríguez eludió también pronunciarse sobre el vídeo en el que aparece el presunto secuestrador de los cooperantes, Omar Saharaui, junto a ellos tras ser liberados por Al-Qaeda en el Magreb Islámico y aseguró que Albert Vilalta y Roque Pascual no le comentaron «nada» sobre este hecho durante el vuelo de regreso a casa.

Críticas del PP

El PP español ha pedido explicaciones a la vicepresidenta, María Teresa Fernández De la Vega, y, por boca de su portavoz de Exteriores, Gustavo De Arístegui, acusó al Gobierno español de «alentar y financiar la industria del crimen y el secuestro».

«¿Qué hubieran hecho ellos?», preguntó la portavoz de Exteriores del PSOE, Elena Valenciano.