«Depredador» funcionó tan bien como «Alien» en su condición de cruce entre el género de ciencia-ficción y el terror. Y si a los aficionados les gustó el efecto multiplicador que James Cameron aplicó a «Alien» era simple cuestión de tiempo que sucediera lo propio con «Depredador». Si ha tardado más de la cuenta en llegar «Predators» ha sido debido a que el guión de Robert Rodríguez escribió en su época se quedó guardado en algún cajón de la Fox. Tras tanta secuela fallida algún ejecutivo ha debido de pensar que ya era hora de adaptarlo, acabando finalmente la dirección en manos del realizador de origen húngaro Nimród Antal, que pertenece a la estirpe de aquellos artesanos de la Europa del Este que aportaron tanto al cine de género en Hollywood.

El director de «Blindado» ha contado con un excelente cartel encabezado por Adrien Brody y Laurence Fishburne, pese a que el reparto de papeles sigue la filosofía de las producciones de serie B, al reunir a una serie de tipos duros de distintas razas. Todos ellos conforman un grupo de mercenarios que será abducido al planeta de caza de los depredadores alienígenas para servir de presas.