OLASO
Delirio
Dicen que todo tiene un límite, hasta el disparate. Pero Yolanda Barcina no lo conoce. La moción para que el Consistorio de Iruñea muestre su «rechazo y estupor» por el acuerdo estratégico firmado entre Eusko Alkartasuna y la izquierda abertzale sólo puede entenderse por el delirio febril de su proponente o por un nerviosismo tal vez justificado ante lo por venir. Y es que, aunque Barcina no alcance a comprenderlo, no hay moción que pueda poner coto a la voluntad popular.