Iñigo Diaz es uno de esos pelotaris a los que ser profesional les cuesta un gran esfuerzo. En sus cinco años de profesional, su txapela en la jaula de segunda de 2007 ante Argote era hasta ayer su su mejor logro, por lo que el ir renovando su contrato año a año y prolongar su sueño de seguir siendo pelotari ya era bastante triunfo, ya que el de Santacara ya se ha labrado un futuro con sus estudios de ingeniería. Ayer sin embargo, en su tercer intento entre las estrellas del cuadro profesional, protagonizó la primera gran sorpresa del campeonato del cuatro y medio y disfrutó de su día más grande tras minimizar a Asier Olaizola, uno de los pelotaris más regulares de los últimos años.

Hace dos años, en su debut en la jaula de primera, el mayor de los hermanos de Goizueta le cobró la novatada y lo dejó en seis, por lo que Olaizola I era el gran favorito en el partido de ayer. Incluso comenzó mandando 2-0 el partido de Gernika, sin embargo, Iñigo Diaz sacó a relucir esas cualidades para el acotado que tan difícil le puso las cosas el año pasado al a la postre campeón Sebastien Gonzalez. Con 19 tantos, el iruindarra fue el pelotari que más tantos le hizo al de Azkaine, y ayer demostró que no fue por casualidad.

Y es que, Iñigo Diaz no se conformó con conseguir la victoria, sino que además se permitió el lujo de disfrutar en la cancha. Lejos de amedrentarse, el delantero de Asegarce dio un paso al frente, se mostró muy valiente y acertado en ataque y desarboló por completo a un Asier Olaizola que nunca pudo sacar su derecha, ni jugar a bote.

Con un amplio repertorio de remates, Díaz buscó muy bien los ángulos del Santanape de Gernika y se anotó un total de 11 tantos en juego. El saque, jugada con la que consiguió seis tantos, fue otra arma importante y, con permiso de Urrutikoetxea o Zubieta, el campeón Gonzalez no puede estar tranquilo.

El campeonato no ha arrancado con demasiado buen pie, por lo menos en lo que a emoción se refiere, ya que el partido de Iruñea fue todavía más desnivelado y Oinatz Bengoetxea, aquí sí, hizo buenos todos los pronósticos deshaciéndose de Mikel Beroiz por la vía rápida.

Tras un verano antagónico de ambos protagonistas, el zaguero uhartearra partía con el claro objetivo de mejorar la pobre imagen mostrada el año pasado ante el propio Oinatz Bengoetxea, pero su puesta en escena aún fue más deficiente, ya que sólo pudo sumar tres tantos.

Con el baile de horarios que ha habido y lo corto que resultó el partido de campeonato, fueron más de una las cámaras de televisión que se quedaron sin tomar imágenes de un partido en el que Oinatz Bengoetxea lo volvió a bordar.

El delantero de Leitza está en un gran momento de forma y ayer arrolló a un Mikel Beroiz que no termina de tomarle la medida a la jaula, con una estadística inmaculada de 16 tantos en juego y ningún error. Ahora deberá esperar para saber si su rival será Abel Barriola o Ekaitz Saralegi.

Otro mal rato de Aritz Lasa

El viernes por la noche, Aritz Lasa, y con él todo el Ederrena de Urretxu, volvió a llevarse un muy mal rato ante Stephane Lemuno en el partido que abrió la competición. Al contrario de lo que sucedió en el Manomanista de Segunda, aprovechando la precipitación y los errores del lapurtarra, el delantero de Aspe, con un juego serio pero sin brillo, logró ponerse 19-8. Todo parecía decidido.

Sin embargo, el de Urretxu, que en los últimos días ha sufrido un proceso febril, dejó de sentirse cómodo en la cancha, permitió que Lemuno se viniera arriba demostrando su repertorio de aire, y puso un nudo en la garganta a más de uno acercándose 19-17. La reacción llegó muy tarde y Lasa se medirá al ganador del Ruiz-Olaetxea.