El talento puede surgir en las películas menos pretenciosas y así se explica que un realizador de comedias desmadradas como Tood Phillips haya llegado a ser respetado como cineasta, lo que ocurrió a partir de «Escuela de pringaos», inmediatamente superada en inspiración humorística por «Resacón en Las Vegas».

Los que siguen sin respetar al nuevo maestro de la comedia son los distribuidores, que parecen disfrutar cargándose los títulos originales de las películas de Phillips para sustituirlos por otros mucho más cutres. «Due Date» ha sido cambiado por «Salidos de cuentas», porque no hay más que leer la sinopsis para observar que el protagonista tiene cinco días para llegar a su casa a tiempo del nacimiento de su primer hijo, porque su mujer sale de cuentas justo en ese plazo de tiempo.

Los juegos de palabras también motivan a los guionistas, dado que «Due Date» hace que un embarazo dé lugar a una situación embarazosa. Aunque en esta ocasión más que de escribir una historia propiamente dicha se trataba de poner las bases para el lucimiento de la pareja estelar, que ha dispuesto de una perfecta excusa argumental de cara a demostrar su capacidad de improvisación.

Todo buen aficionado al cine quiere ver a un actor consagrado junto a otro que es el más prometedor del momento, ya que de esas combinaciones nacen experiencias interpretativas hechas a base de deliberados contrastes. Robert Downey Jr. y Zach Galifianakis son del todo antagónicos, por lo que sus personajes están condenados a chocar desde la primera secuencia a la última. Todd Phillips ha querido darse el capricho de dirigirles antes de meterse de lleno con la continuación de «Resacón en Las Vegas». Es un puro divertimento, un regalo para quienes se divierten con las actuaciones abiertas más que con un guión cerrado. En un viaje todo puede pasar, y más aún si quienes son compañeros accidentales de viaje no están hechos el uno para el otro. La caricatura del reconocible ser irritante que de repente se cruza en nuestro camino siempre funciona, en cuanto representación de los inconvenientes que surgen a cada paso en la vida diaria.