Leire Olaberria y su medalla de oro ya están en casa. Pero la satisfacción y las celebraciones no han tardado en dejar paso a los planes de futuro. Tras su victoria en el Campeonato Europeo, la ciclista guipuzcoana ya piensa en los Juegos de Londres.

Y es que, según confesó ayer en un encuentro organizado por la Fundación BAT Basque Team, Olaberria se siente en su «mejor momento», pero también se ve con margen de progresión. De ahí que la corredora de Ikaztegieta se muestre optimista, ante la perspectiva de contar por delante con «dos años largos para seguir mejorando» hasta la cita olímpica. Se muestra, además, convencida, de que llegará «a Londres siendo mejor corredora que en Pekín» (donde logró la medalla de bronce). Pero también quiere ser «realista», porque «nunca se puede dar un resultado por hecho», pese a insistir en que todavía no ha alcanzado su «tope» y a que su «compromiso será el máximo».

Lo cierto es que Olaberria no ha dejado de progresar, desde que se estrenara en pista, hace apenas media docena de años. Los Campeonatos de España se le rindieron desde un principio: ha logrado oros en todas las ediciones desde su debut, en 2004. Qué decir de lo sucedido esta temporada, en la que ha añadido las victorias en carretera, tanto en línea como contrarreloj, a las siete medallas que logró en pista.

A nivel internacional, la ciclista recibió el espaldarazo definitivo en Beijing 2008, con una medalla de bronce que, según explicó ayer, le hizo entender su carrera «desde otro punto de vista», amén de ayudarle a ganar en «confianza».

En los Campeonatos de Europa de Polonia ha dado un paso más. No sólo porque se ha colgado su primer oro a nivel internacional, sino porque lo ha logrado en la modalidad de omnium, que se estrenó en el Mundial celebrado el pasado año en Dinamarca -donde la guipuzcoana logró la tercera plaza- y que será olímpica a partir, precisamente, de los Juegos de Londres.

El oro conquistado en Pruzskow, además, otorga a Olaberria una buena renta de puntos respecto a sus rivales europeas, de cara al reparto de plazas para los Juegos. Espera ampliarla en las dos pruebas de la Copa del Mundo que disputará en diciembre y, sobre todo, en el Mundial que se celebrará el próximo mes de marzo en la localidad holandesa de Apeldoorn. Una cita a la que la ciclista guipuzcoana espera llegar en un momento mejor aún que el actual para intentar reeditar su éxito en el Europeo.