Una muestra reciente del nivel de calidad alcanzado por la animación del viejo contienente, que se tradujo en una nonimación para «Las aventuras de Sammy» en los premios del cine europeo. Esta producción belga compagina el cuento infantil con el rigor de los documentales oceanográficos.

La película sigue la vida de una tortuga marina a lo largo de cincuenta años de migraciones, presentando a Sammy como una de las pocas que logran sobrevivir a un viaje lleno de peligros. El relato abarca desde su nacimiento en una playa hasta su regreso a ese mismo lugar, tras haber recorrido el mundo y haber conocido a los humanos. Un punto en el que no puede faltar el mensaje ecológico frente a las mareas negras y la pesca incontrolada. Sammy huirá de las aguas contaminadas y encontrará a su tortuga amiga.