El alto el fuego permanente, general y verificable anunciado por ETA fue recibido por la izquierda abertzale como una decisión «valiente, unilateral y de alcance histórico». En la valoración de urgencia realizada por la tarde en un hotel de Donostia, sostuvo que este pronunciamiento de ETA «abre de forma clara e inequívoca la oportunidad de avanzar de forma irreversible hacia un marco de paz y soluciones democráticas».

Marian Beitialarrangoitia y Txelui Moreno, en euskara y castellano, aseguraron que la organización armada ha contribuido a crear las «condiciones democráticas para una inaplazable normalización política», que, como auguraron además, será «la antesala de un proceso de diálogo y negociación inclusivo e integral entre todas las fuerzas políticas vascas».

Ante una sala abarrotada de medios de comunicación, los representantes de la izquierda abertzale se congratularon de que la decisión adoptada por ETA responda satisfactoriamente a la demanda de la comunidad internacional, reflejada en la Declaración de Bruselas, y a la que importantes sectores de la sociedad vasca realizaron en Gernika tanto a la organización armada como al Ejecutivo español para que ambos aportaran en la creación de un escenario de no-violencia con garantías.

Desterrar los «engaños»

Al igual que anunciara con anterioridad el facilitador sudafricano Brian Currin, la izquierda abertzale insistió también en que la decisión de ETA «cumple todos los requisitos» para la puesta en marcha del Grupo Internacional de Contacto, con el que ya se ha puesto en contacto Currin para preparar su primera visita a Euskal Herria e iniciar su trayectoria.

En la comparecencia, en la que también participaron Rufi Etxeberria y Miren Legorburu, los representantes independentistas demandaron «responsabilidad y altura de miras» al Gobierno español, al PSOE y al conjunto de la clase política, sindical y social. Una demanda que hicieron extensible también al Gobierno francés, por «su implicación y responsabilidad» en el conflicto que perdura en Euskal Herria.

Anticipándose a las declaraciones negativas, incidieron en que abordar la lectura de este comunicado en términos de «suficiencia e insuficiencia, mantenimiento de presuntos tutelajes o la no desaparición de la organización» supone «un irresponsable intento de desvirtuar su contenido y engañar a la sociedad».

Tras resaltar el «incuestionable valor de la decisión sin precedentes» adoptada por ETA, Moreno instó a todos los agentes a valorarla «más allá de poses y discursos que pretenden mantener las inercias clásicas de cada opción política».

Pese a que anticiparon que en los próximos días ofrecerán una nueva comparecencia para valorar de forma más sosegada tanto el comunicado como las reacciones generadas, Beitialarran- goitia afirmó que el pronunciamiento de ETA «profundiza de forma plena» en la apuesta por un proceso democrático que hace la izquierda abertzale.

En este sentido, aprovechando el interés mediático suscitado, la izquierda abertzale se reafirmó en la apuesta política aprobada en el documento ``Zutik Euskal Herria'', fruto de una reflexión interna que recoge las líneas maestras del nuevo proyecto político y organizativo y establece un compromiso con vías políticas y democráticas.

Aval definitivo

Con la esperanza de que más pronto que tarde se abra una etapa en la que se empiece «a construir positivamente el escenario que la mayoría de la sociedad vasca e, incluso la española, desean», la izquierda abertzale fijó su atención en el trabajo militante que desarrolla pueblo a pueblo y barrio a barrio. Apeló a ese trabajo y animó a la sociedad vasca a contribuir en él «con ilusión y compromiso».

Txelui Moreno destacó incluso que este trabajo militante será «el aval definitivo» para que todo este proceso llegue a buen puerto.