Madrid quiere dar esta semana «un acelerón» a la reforma de las cajas
El Gobierno español quiere dar un «acelerón» a la reforma de las cajas de ahorro, según anunció ayer el vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba. Esta reforma, que profundizará en su privatización, supondrá facilitar el acceso de capital privado a la propiedad de las cajas, aprovechando los problemas de solvencia de algunas de ellas, una puerta que ya se abrió el año pasado con los cambios introducidos en la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorros.
GARA |
El vicepresidente primero del Gobierno español y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunció ayer que esta semana será «muy importante» para la economía española, puesto que el Gobierno dará «un acelerón» a la política de reformas del sistema financiero, «fundamentalmente de las cajas».
Acuciado por los inversores, la Comisión Europea y la presión sobre la deuda, el Gobierno quiere dar mayor velocidad tanto a las reformas laborales como a las del sistema financiero.
Durante su participación en la clausura en Guadalajara del Foro «Políticas de Empleo y Nuevo Modelo Productivo» del PSOE, señaló que el objetivo es que «bancos y cajas presten dinero a las familias, a las empresas, a los pequeños y medianos empresarios para crear riqueza y empleo». «Este es el objetivo de la reforma que vamos a impulsar, a acelerar esta semana», añadió, sin ofrecer más detalles sobre el contenido de la reforma.
«Estamos pensando en crear riqueza y empleo», explicó Rubalcaba, para quien el sistema financiero es «el corazón de la economía», por lo que es importante que «quien quiera invertir y arriesgar tenga créditos disponibles a dinero barato». El Gobierno español ya anunció el pasado viernes Madrid que está preparando un plan para «reforzar» la solvencia y la credibilidad de las cajas».
Privatización
Esta reforma será un paso más en el proceso iniciado en 2010 para su privatización, a través del Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB) y de la nueva norma que ha permitido la entrada de capital privado en estas entidades hasta ahora públicas, y creadas con cierta orientación social.
A través del FROB, el Gobierno español las ha empujado a crear grupos que garanticen su viabilidad financiera, creando de hecho bancos bajo las figuras de las «fusiones frías» o SIP. Una cuarententa de cajas han participado en este proceso para crear 17 entidades, entre ellas las vascas BBK, con la compra de Cajasur, y CAN, en el proyecto de Banca Cívica, operaciones que en ambos casos han deteriorado su nivel de solvencia anterior.
Aun así, para el Gobierno español esta reestructuración no es suficiente, sobre todo tras las presiones de los mercados financieros y de las instituciones europeas para que siga acometiendo «reformas estructurales», presiones que afectan a la deuda pública española. El FROB, creado en junio de 2009 por el ministerio de Economía y el Banco de España, estima que se podrían llevar a cabo nuevas reformas legales para «reforzar la transparencia y solvencia del sector».
Entre las hipótesis de trabajo que maneja el FROB se encuentra facilitar el recurso a los mercados para que las cajas puedan financiarse, es decir, abrir más la puerta a capitales privados y fondos de inversión en la propiedad de las cajas.
En el caso de que las cajas no consigan suficientes fondos del capital privado el FROB aportaría «si fuese necesario, un apoyo temporal» para buscar inversores y, «como último recurso», podría proceder a una nacionalización parcial de ciertas cajas.
El diario «El País» aseguró que el Gobierno podría aprobar «antes de fin de mes», el decreto que recoja estos cambios.