Legalización de la izquierda abertzale
López ha hecho la ronda sobre Sortu sin conocer sus estatutos
Las peticiones que le hizo ayer a la izquierda abertzale de que rechace la violencia actual y trabaje junto a otros partidos para que ETA desaparezca se recogen en el artículo preliminar y en el tercero de los estatutos de la nueva formación, que se hicieron públicos hace ya más de dos semanas.
Iñaki IRIONDO | GASTEIZ
El lehendakari compareció ayer ante los medios de comunicación para hacer una valoración de la ronda de contactos mantenidos con «los partidos con representación parlamentaria» para analizar la situación creada tras la presentación de los nuevos compromisos públicos de la izquierda abertzale. Tras una primera intervención en la que le exigió que «tiene que demostrarnos, con hechos claros, que han roto con el pasado, que renuncia a la violencia y al terror», en el turno de preguntas dio muestras de que no conoce ni siquiera lo que Sortu ha escrito al respecto en sus estatutos.
Preguntado sobre qué tendría que hacer la izquierda abertzale para «ganarse la confianza de los vascos», como había pedido, Patxi López respondió que «yo no soy un tribunal para decir cuáles son las condiciones que tiene que cumplir pero, por ejemplo, en este momento no entiendo por qué rechazan violencias futuras y no actuales, por qué no se pide y exige la desaparición de ETA, que es lo que hacemos todos los demócratas. Por qué no empezamos a trabajar todos conjuntamente para que ETA desaparezca».
Como se recoge en esta misma página, el artículo preliminar de los estatutos de Sortu y el tercero ya abordan explícitamente estos compromisos.
Sin embargo, el lehendakari insistió en sus respuestas en que lo planteado por la izquierda abertzale supone «un rechazo a futuro».
Al inquerirle directamente por qué se refería a un rechazo «a futuro» cuando los estatutos hablan claramente del presente, Patxi López contestó que «lo que han dicho es que rechazaremos la violencia, incluso la de ETA, si la hubiera».
Tras hacerle ver que esas palabras figuran en el discurso del 7 de febrero de Rufi Etxeberria en el Euskalduna pero los estatutos rechazan la violencia actual, se limitó a decir: «Bueno, me parece muy bien. Entonces los tribunales también valorarán eso».
Contra una mesa de partidos
En su valoración de la ronda con los partidos, el lehendakari destacó que «aunque tengamos posiciones diferentes en algunas cosas, es evidente que existe unanimidad absoluta en manifestar que el objetivo prioritario de todos es lograr el fin de ETA y del terrorismo lo antes posible».
Recordó que algunas formaciones le han pedido la convocatoria de una mesa de partidos y aseguró que «yo no la veo ni necesaria, ni siquiera conveniente». A su entender, «ésta es una vieja reivindicación que ETA asocia a la consecución de sus objetivos políticos, esos que ha pretendido imponer con el terror. Y no estoy dispuesto, porque no podemos permitir, que esa mesa de partidos se convierta en una ventanilla para pagar un precio por dejar de matar».
Patxi López resaltó que «si queremos plantear propuestas políticas, la democracia tiene un lugar para ello: las instituciones, y el Parlamento como su máximo representante». Y que si la izquierda abertzale es legalizada, podrá participar en ellas.
En la hipótesis de que Sortu fuera legalizada ahora y a la vista de que seguiría fuera del Parlamento de Gasteiz otros dos años, se le preguntó al lehendakari si establecería cauces de diálogo y respondió que «yo hablo con todas las fuerzas legales de este país»-
«Justicia, verdad y democracia»
Colocándose ya en un escenario sin violencia de ETA, el lehendakari señaló que labor de las instituciones y los partidos es «ganar la convivencia». Y él pro- pone tres guías: «Justicia para reconocer el daño causado, ara reconocer el sufrimiento de las víctimas. Verdad para relatar lo sucedido, para que el horror vivido sea un muro contra la intolerancia en el futuro. Y democracia como la casa común en la que podemos habitar todos, con igual libertad e iguales derechos».
Según manifestó ayer, en la ronda no ha obtenido otro acuerdo con los partidos que el de seguir hablando sobre estas cuestiones.
Patxi López
«Pues yo no soy un tribunal para decir cuáles son las condiciones que tiene que cumplir pero, por ejemplo, en este momento, no entiendo por qué rechazan violencias futuras y no actuales...».
Art. 3 de los estatutos de Sortu
«Sortu desarrollará su actividad desde el rechazo de la violencia como instrumento de acción política o método para el logro de objetivos políticos, cualquiera que sea su origen y naturaleza; rechazo que, abiertamente y sin ambages, incluye a la organización ETA, en cuanto sujeto activo de conductas que vulneran derechos y libertades fundamentales de las personas».
Patxi López
«¿Por qué no se pide y exige la desaparición de ETA, que es lo que hacemos todos los demócratas?. ¿Por qué no empezamos a trabajar todos conjuntamente para que ETA desaparezca?
Art. Preliminar de los estatutos de Sortu
«Por eso, mostramos nuestra voluntad y deseo de contribuir con el resto de agentes políticos, sociales y sindicales: -A la definitiva y total desaparición de cualquier clase de violencia, en particular la de la organización ETA».
La manifestación convocada en Madrid por la AVT y otras organizaciones contra la legalización de Sortu ha abierto un punto de fricción entre el PSE y el PP. El secretario general del PP de la CAV, Iñaki Oyarzábal, emplazó ayer al PSE y hasta al PNV a que «eliminen sus prejuicios» y secunden la manifestación, que cuenta con el apoyo de la dirección que encabeza Mariano Rajoy. Sin embargo, el secretario general del PSE de Araba, Txarli Prieto, afirmó que la movilización convocada para el día 9 de abril «en realidad a quien pone en cuestión es al Estado de Derecho y a los jueces». Su compañero y portavoz del partido, José Antonio Pastor, dijo que no entiende «qué pintan dirigentes del PP, especialmente del País Vasco», en esa marcha.
La AVT y otros grupos afines han hecho su llamamiento porque «ETA no puede concurrir a las urnas ni bajo las siglas de un partido nuevo, ni a través de agrupaciones electorales, ni empotrada en ningún partido legal. No aceptamos ni el plan A de Sortu, ni el plan B de las agrupaciones, ni el plan C de EA y los autodenominados `polos soberanistas'». Y añaden en el llamamiento que «consideramos especialmente alarmantes los intentos de endosar en exclusiva a los tribunales de Justicia la responsabilidad de impedir la presencia de ETA. La responsabilidad primera es del Gobierno, porque es el Gobierno quien debe aportar las pruebas necesarias para frenar los planes de ETA».
El lehendakari, Patxi López, dijo que respeta todas las manifestaciones, pero parafraseando lo dicho por su consejero de Interior la víspera, la calificó de «preventiva» frente a algo que «no sucede ni sucederá» ya que el Estado «no negocia ni negociará» con ETA. Y añadió que si pretende reclamar que Sortu no sea inscrita en el registro de partidos, está «mal enfocada», dado que esta es una decisión que han de adoptar «sin presiones» los tribunales. Asimismo, afirmó no coincidir «en absoluto» con la decisión del PP de apoyar la marcha.
Además del PP, también UPyD anunció ayer su adhesión a la convocatoria, puesto que «no puede menos que acompañar a las víctimas del terrorismo en sus justas reivindicaciones». GARA
El dirigente de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria sostiene que «las elecciones tienen que ser una palanca para desarrollar nuestra apuesta política. Para hacer emerger el sujeto de cambio político y social de Euskal Herria». En unas declaraciones publicadas en la web www.ezkerabertzalea.info, recogidas por Europa Press, señala que la legalización de la izquierda abertzale es «un paso en consonancia con la estrategia definida en Zutik Euskal Herria», y destaca que la apuesta por una nueva fase política desde vías políticas y democráticas «es el elemento central para situar la legalización en los términos en que se plantea, y con el objetivo de lograr la misma e incidir en el escenario político y social vasco».
Rufi Etxeberria explica que «las elecciones son una oportunidad para llevar al ámbito institucional esta fuerza emergente e imparable de un espacio independentista, que será en poco tiempo el carril central de la política vasca». Y apunta que esa unión debe hacerse «por encima de diferencias en relación a trayectorias o posiciones contradictorias en temas concretos». Remarca también que la izquierda abertzale y el resto de fuerzas «tenemos que ser capaces de situar de forma convergente y eficaz los contenidos que deben permitir a este pueblo avanzar».
Etxeberria destaca que «tenemos que cambiar la cultura de alianzas dando importancia a la suma en base a programas y reivindicaciones que permitan incidir de forma eficaz en los cambios sociales». Y recoge que el objetivo es que el respaldo electoral obtenido sea utilizado «en las instituciones para darle el poder al pueblo. Debemos ser garantía para que el poder popular se abra camino y establezca un nuevo modo de entender el poder institucional erradicando el modelo actual distante de la ciudadanía, partidista y con corruptelas».
En los vídeos se recoge que «el acuerdo estratégico entre la izquierda abertzale y EA, y el acuerdo de ambos con Alternatiba para una propuesta soberanista y de cambio social, está abriendo una correlación de fuerzas nueva y determinante para profundizar en el proceso democrático y avanzar en un proceso de negociación desde una posición de fuerza del soberanismo e independentismo vasco».
Sobre Nafarroa, Etxeberria destaca la importancia de los movimientos producidos. Afirma que «la decisión de Aralar de hacer de NaBai una franquicia del PNV en el marco de las relaciones entre ambos para posibles acuerdos en otros territorios desmonta la apuesta de cambio que pretendía proyectar». GARA