Abierta al tráfico la variante de Andoain, que enlaza la autovía del Urumea con la N-I
La variante de Andoain, el último tramo que quedaba por construir para enlazar la autovía del Urumea, quedó ayer abierta al tráfico. Absorberá el 75% de los 13.000 vehículos que circulan a diario por el casco urbano.GARA | ANDOAIN
La nueva variante, de 2,2 kilómetros de longitud, permite que la autovía del Urumea se comunique directamente con la carretera N-I a través del enlace de Bazkardo y posibilita la continuidad completa del corredor alternativo a la N-I entre Donostia y Andoain.
El desdoblamiento de la variante de Hernani, actualmente en obras, permitirá culminar por completo los trabajos de construcción de un eje que en los próximos años descargará 30.000 vehículos diarios del tramo más saturado de la N-I.
El diputado foral de Infraestructuras Viarias, Eneko Goia, dijo que el actual empalme de la autovía del Urumea con la N-I es «provisional» y, aunque han tratado de solucionarlo de la mejor manera posible, «será perfecto el día que la variante de la N-I en Andoain sea una realidad».
«Ése es el proyecto más importante en el que trabaja el departamento y con el que esperan contar a partir de abril y será, sin ninguna duda, la prioridad y el reto más importante de cara al futuro», enfatizó.
Goia se congratuló de la inauguración de una obra «muy complicada» con «muchísimas dificultades» y un enorme esfuerzo, que «ha merecido la pena» dado que redundará en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. De hecho, se calcula que la apertura de la variante suponga una revolución en la vida cotidiana de los andoaindarras, similar al registrado tras la inauguración de otros tramos en Urnieta, Astigarraga, Martutene y Loiola.