Las necesidades de liquidez de la banca irlandesa, que precisa 24.000 millones de euros adicionales para evitar su colapso, según desveló el pasado jueves el Gobierno de ese país, están cubiertas con el programa europeo de rescate, según consideró ayer un portavoz de la Comisión Europea.

El portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios, Amadeu Altafaj, dijo que el programa de asistencia había reservado 35.000 millones de euros de un total de 85.000 para hacer frente a la factura de la crisis bancaria.

El portavoz consideró que el diagnóstico ofrecido el jueves por el Banco Central de Irlanda es «muy riguroso» y «debería convencer a los actores del mercado de que no debería haber más sorpresas», al «minimizar» las probabilidades de que Irlanda deba acometer una nueva ronda de recapitalizaciones.

Tras conocer que tendrá que inyectar otros 24.000 millones adicionales para evitar su colapso, el Gobierno irlandés decidió el jueves acometer una reforma radical de su sistema financiero, reduciendo el número de entidades y creando dos bancos principales.

Las entidades sometidas a pruebas de solvencia son Irish Life & Permanent (IL&P), Bank Of Ireland (BoI), Allied Irish Banks (AIB) y ESB, estas dos últimas ya bajo control estatal junto al Anglo Irish Bank y el Irish Nationwide.

Además de los 46.000 millones de euros ya aportados por el Estado desde 2008, los test indican que el AIB necesita 13.300 millones de euros adicionales, seguido por el BoI con 5.200 millones, ESB con 1.500 millones e IL&P con 4.000 millones de euros.

Portugal «no miente»

En referencia a Portugal, el portavoz de Asuntos Económicos dijo que la revisión del déficit que hizo el Gobierno hasta situarlo en el 8,6% del PIB, en lugar del 7,3% previsto, no se debe a que Lisboa haya mentido o maquillado los datos como hizo Grecia, sino a la correcta aplicación de los estándares de contabilidad de la UE.

Entretanto, Portugal logró colocar ayer 1.645 millones de euros a quince meses a un interés del 5,79%, un porcentaje más alto que el de su anterior subasta, pero con una demanda muy superior a la oferta y muy por debajo aún del 6,4% en el que se negocian ese tipo de bonos en el mercado secundario.