Los comités de las filiales del grupo aeronáutico alavés Aernnova, como Fuasa, Moasa, Hegal y Fibertecnic, exigieron a las instituciones públicas que «garanticen el empleo ante una posible venta de acciones a un fondo inversor de Abu Dhabi». Denunciaron, por otro lado, que «hace unos años» este grupo con sus filiales contaba con más de 3.000 trabajadores, pero en la actualidad «apenas alcanzamos una plantilla de 1.300 trabajadores».

En una rueda de prensa en la sede del sindicato LAB de Gasteiz hicieron un llamamiento a la población gasteiztarra para que acudan este sábado a una manifestación que partirá a las 12.00 de la Plaza Bilbao y que, tras recorrer varias calles céntricas, terminará ante la sede de la Diputación alavesa.

De forma extraoficial, los representantes de los trabajadores ha conocido las intenciones del grupo aeronáutico de vender el 71% del grupo a un fondo inversor del Gobierno de Abu Dhabi, a la vez que indicaron que «se están elevando los rumores de una posible fusión con otras empresas o grupos, como Aciturri o Alestis, que crearía un subcontratista de primer nivel para Airbus». Si ocurriera así, como temen los sindicalistas, el nuevo grupo sería un «coloso controlado y gestionado por las instituciones de Catalunya, Castilla-León, Castilla-La Mancha y Abu Dhabi, pero no habría ninguna institución vasca en el control y gestión del mismo».

Ambas situaciones alertan a los comités porque consideran que si el control y la gestión del grupo pasa a otros lugares, la carga de trabajo y el futuro del empleo también puede cambiar en este nuevo mapa. «Denunciamos estas maniobras puramente especulativas que en pocas ocasiones o en ninguna revierten positivamente ni en los trabajadores ni en el territorio que dio vida al proyecto».

En este caso, recuerdan amargamente lo que ocurrió con Gamesa Aeronáutica, que contó con todas las bendiciones y ayudas económicas del Gobierno de Gasteiz y que fue esa inversión la que impulsó la creación del Parque Tecnológico de Miñano pero, «en cuanto le dejó de interesar el negocio aeronáutico se desprendió del mismo y se marchó a Castilla La Mancha, sin que ni la Administración vasca ni la alavesa hicieran nada por mantener el negocio».

Para que no ocurra lo mismo, los comités de Aernnova, que es el grupo que se quedó con el negocio aeronáutico de la antigua Gamesa, exigen a Diputación y Gobierno de Gasteiz «que actúen antes de que sea tarde».