Resaca tras los sucesos de Burdeos
La ACT asume sus errores y pide disculpas por lo sucedido
El gerente Iñaki Mikeo dice que se ve con fuerzas para seguir en el cargo si así lo deciden los clubes.
A.A.
Tras el lamentable espectáculo ofrecido en Burdeos durante el fin de semana, la Asociación de Clubes de Traineras (ACT) emitió ayer un ambiguo comunicado de la Junta Directiva y la Gerencia para «pedir de forma sincera disculpas a deportistas, entrenadores, clubes, directivos, aficionados y patrocinadores».
En la misma, los rectores de la ACT dejan claro que «se asumen los errores organizativos y se analizarán en el seno de la asociación para que no se vuelvan a producir situaciones tan desagradables y lamentables».
En un segundo párrafo, el comunicado añade que «tan o más importante como cualquier depuración de responsabilidades, sería en este momento trabajar de forma que se pueda ofrecer a todos los agentes del mundo del remo, en especial los deportistas y aficionados, una excelente competición en todos sus sentidos».
Para ello, los rectores de la ACT entienden que «más allá de las personas que gestionen en cada momento la ACT, entidad propiedad de sus 12 clubes socios, en este momento con más responsabilidad y auto-exigencia que nunca, nuestra asociación debe comprometerse a ofrecer una competición de máximas garantías y nivel organizativo. Estamos convencidos de que, aprendiendo de nuestros errores, con el apoyo y entendimiento de todos tal objetivo será logrado».
No obstante, el gerente Iñaki Mikeo se reafirmó en que pondrá su cargo a disposición de la ACT, para que primero la Junta Directiva y luego la Asamblea General decidan si debe seguir gestionando la asociación o no. «Toda la culpa es mía. Los clubes confiaron en mí para organizar la prueba, la aprobaron porque confiaban en mí, y les he fallado. Asumo buena parte de la responsabilidad. Yo me veo con fuerzas para seguir, pero lo deben decidir ellos», manifestó en declaraciones recogidas por Euskal Telebista.
Mikeo, que volvió a lamentarse de que los técnicos franceses le dijeron que no habría ningún problema para embarcar en bajamar, reconoció que las pérdidas económicas por lo sucedido en Burdeos serán considerables y que la ACT deberá encontrar el modo de hacer frente a ellas.
Se espera que la Junta Directiva celebre una reunión esta misma semana, aunque la próxima cita de la Liga San Miguel no llegará hasta el 2 de julio en aguas de Camargo. Como receta para el futuro, Iñaki Mikeo abogó por «ser un poco más conservadores, no arriesgar tanto en busca de novedades, y mimar un poco más el producto, es decir, el ámbito puramente deportivo de la liga». La polémica seguirá coleando los próximos días.
«La culpa es mía. Los clubes aprobaron la regata de Burdeos porque confiaban en mí, y les he fallado. Asumo la responsabilidad y pongo mi cargo a su disposición», declaró el gerente de la ACT.