La operación salida comienza estos días. Iruñea-Mallorca puede ser un buen viaje para disfrutar de unas buenas y merecidas vacaciones. Pero el gallego Rubén González Rocha ha hecho el trayecto a la inversa para pasar el reconocimiento médico y ser presentado con Osasuna.

El nuevo fichaje rojillo llega a Iruñea para aportar «trabajo, experiencia, humildad y todo lo que esté en mi mano para favorecer al equipo», indicó ayer Rubén en rueda de prensa.

Con este nuevo defensa, el club navarro se afianza con «un central rápido, contundente y con buen juego aéreo. Lo demás se irá viendo a lo largo de la temporada», se definió. Además, fue claro al señalar que «me motiva formar parte del proyecto de Osasuna».

«Primer paso, la permanencia»

No obstante, «no me gusta ponerme metas, pero el primer paso es la permanencia. No debemos pecar de ambiciosos, sobre todo, ahora que en el fútbol cada vez hay más equipos luchando por la permanencia. Una vez conseguida, lo que venga, bueno será», aclaró Rubén.

Por último, reconoció que la decisión de recalar en Osasuna fue fácil: «Además, que un club humilde lleve doce años consecutivos en Primera es un ejemplo de que se hacen las cosas bien, éstas salen». Y también dejó clara la postura del club navarro a la hora de ficharlo: «Osasuna lo ha hecho todo con seriedad. En enero empezaron los contactos, pero siempre han respetado el tiempo. Su comportamiento ha sido ejemplar».