La tercera reunión de la mesa laboral, que los responsables de BBK, Vital y Kutxa han constituido, para determinar las condiciones en que se traspasará a las plantillas al nuevo banco terminó sin acercamiento. Los responsables de las cajas presentaron un documento denominado «Borrador de Propuesta para el Acuerdo Laboral» en el que aseguraron que «no habrá despidos traumáticos» siempre que «se acepte» el documento de trece páginas en su conjunto, pero que en el mismo sí incluyen esa posibilidad de deshacerse de parte de la plantilla.

La negociación parte de unas restricciones, porque las cajas no están dispuestas a tener en cuenta el Marco Vasco de Relaciones Laborales para negociar un convenio para la plantilla de Hego Euskal Herria y otro para la plantilla de las oficinas de la expansión. Tampoco garantiza que el conjunto de las plantillas actuales, tanto de las cajas como de la Obra Social, pasen a formar parte del banco, en caso de que llegue a constituirse.

Para ELA, la decisión de los responsables de las tres cajas supone «dejar poco espacio para la negociación» y, en cambio, LAB destaca que «es un chantaje intolerable». De hecho, Joxean Urkiola, responsable de LAB Finantzak, recuerda que esas premisas ya las utilizó BBK cuando compró Caja Sur. «Allí también han despedido a trabajadores, de forma traumática después de que se firmaron acuerdos laborales, por lo que esa vía para eliminar plantilla es una herramienta que ha utilizado BBK este mismo año y hay sindicatos que están apoyando esas medidas», indicó.

Urkiola dejó claro que LAB no aceptará «ni un sólo despido, ni expediente de regulación». El representante sindical añadió que «nos oponemos a la bancarización y privatización de las cajas». A juicio de Joxean Urkiola, las cajas vascas son solventes y, por lo tanto, se debe preservar ese modelo y función social que han logrado durante su historia». ELA, por otro lado, recuerda que en una reciente entrevista del presidente de BBK, Mario Fernández, explicó que «los tiempos son muy complicados y para cumplir nuestra obligación de que las cajas sigan estando entre las más solventes tendremos que hacer con seguridad algún tipo de ajuste».

Fuentes de Pixkanaka califican de «decepcionante» el documento y señalan, aunque se han dado margen hasta la próxima semana para estudiar la oferta en la reunión del 27 de julio en Donostia, que no van a tener «mucho recorrido». Esa posición es similar a la CCOO y los independientes de Vital.

Por otro lado, Kutxa informó ayer que va a iniciar «una campaña de difusión de los beneficios para Gipuzkoa de la integración de las cajas vascas». Se quieren explicar «las razones que han llevado al Consejo de Administración» al aceptar la conversión de las cajas en un banco privado. Hasta la fecha, ninguna de las tres cajas ha explicado de forma pública las razones de adoptar esa decisión para llevar adelante Kutxa Bank.