Lo de algunos medios será materia de estudio dentro de unos años en las Facultades de Periodismo. Si el jueves llamaba la atención que la prensa «liberal» respondiera a la dimisión de Francisco Camps con perfiles laudatorios, ayer ya desbarraban y ponían al presunto delincuente como modelo. Así lo hacía «ABC», para quien el ya ex presidente valenciano es un «Ejemplo a seguir». Con esta frase, que no deja mucho margen a la interpretación, titulaba el diario de Vocento su editorial. Pero en su interior iban más allá. Vean: «Francisco Camps ha puesto muy alto el listón a la hora de asumir responsabilidades políticas por imputaciones en un proceso penal». Teniendo en cuenta que el caso lleva dos años en los tribunales y que no ha dimitido hasta que le han obligado, eso es discutible.

Pero para el editorialista, «al margen de la decisión final de los jueces, el `caso de los trajes' tiene una importancia objetivamente menor que las acusaciones a que deben hacer frente los implicados en el `caso Faisán' o en el escándalo de los ERE en Andalucia». Lo de al margen de la decisión de los jueces tiene su gracia, porque parece que no les importa que sea culpable inocente. Lo que importa es que el adversario es tan corrupto o más que ellos.

Porque, además, para «ABC» todo esto es una operación contra el pepero valenciano, que debe ser más bueno que una hogaza entera de pan: «Camps ha respondido a la operación de acoso y derribo con una decisión ejemplar desde el punto de visto político, con el objetivo expreso de no perjudicar a España y a su partido». Servidora no sabe si a Camps le han acosado, pero andan por ahí unos trajes que merecen una explicación. Pero estamos ya en plena precampaña electoral y de lo que se trata es de zumbar al otro: «La opinión pública exige que los responsables políticos del `caso Faisán' y de los ERE andaluces presenten su dimisión irrevocable para manetenr el nivel de decencia en el ejercicio de los cargos públicos que exige asumir la responsabilidad ante un proceso penal». A mi me da que la opinión pública está bastante hartita de unos y otros y que cree que en el fondo son todos unos corruptos.