El alcalde de Donostia, Juan Carlos Izagirre, propondrá la comparecencia de la asociación SOS Bebés Robados Euskadi en la Comisión de Derechos Humanos del Ayuntamiento, después de que el primer edil pidiese a sus representantes un encuentro, que se celebró el pasado jueves, para conocer su problema de primera mano. Tras escuchar los objetivos del colectivo y saber de sus dificultades, Izagirre mostró su solidaridad y su plena disposición a ayudarles «en todo lo que esté en sus manos», según informó la asociación. Por ejemplo, les ofreció la sala de prensa y un local para que desarrollen sus actividades con más comodidad.

Aunque, en los juzgados de la capital guipuzcoana, la Fiscalía ya tiene entre sus manos alrededor de 115 casos que está investigando, desde SOS Bebés Robados indicaron que cada día siguen llegando indicios de la existencia de nuevas personas afectadas.

A pesar de que el Consistorio no cuenta con competencias administrativas, el alcalde mostró todo su apoyo a este colectivo.

Un día antes de la reunión con el alcalde donostiarra, representantes de la asociación se encontraron con el vicario general de la diócesis de Donostia, Joseba González Zugasti. A éste le plantearon las dificultades que tienen muchos asociados para encontrar pruebas, a lo que el vicario general les ofreció la ayuda necesaria en los registros de la Iglesia guipuzcoana para hallar datos relacionados con los libros de bautismo y defunciones, en especial aquellos provenientes de diferentes centros médicos.

Así, según lo acordado, será SOS Bebés Robados Euskadi quien canalice las peticiones correspondientes ante los responsables de la diócesis en la búsqueda de certificados.