Obama recorre Estados Unidos con la difícil tarea de dar la vuelta a las encuestas
Barack Obama se encuentra de gira por Estados Unidos, y lo hace acuciado por las encuestas, que sitúan su popularidad por debajo del 40%. En un intento de darles la vuelta, centra su mensaje en la economía, lo que resulta totalmente comprensible habida cuenta de que el acuerdo que hubo de «tragar» tras las negociaciones sobre el techo de gasto y el déficit público a buen seguro ha contribuido a rebajar el porcentaje que reflejan las encuestas, al igual que los datos del paro, que lo sitúan en un 9% de desempleados. El fenómeno Obama comenzó a dar motivos de duda al poco tiempo de la elección del presidente, pues si bien acometía la reforma sanitaria, asuntos como la invasión de Afganistán o Guantánamo decepcionaban a no pocos seguidores suyos. Después el fenómeno mostró claros síntomas de haberse desinflado. En su incierto camino, su afán por evitar una política de confrontación con los republicanos es probablemente la causa del desencanto del electorado de posiciones izquierdistas más claras, si bien su trayectoria en política exterior y su falta de decisión en la interior tampoco han pasado desapercibidos. En esta gira se enfrenta a una difícil tarea.