El ganador de la etapa y nuevo líder Joaquim Purito Rodríguez «conocía el final porque vine a verlo con Dani Moreno después de correr la Clásica de Ordizia en julio, y me hacía mucha ilusión ganar aquí». Dedicó su segundo triunfo en la Vuelta a unos amigos de su pueblo (Parets del Vallés) y a su hijo Arnau, «que lo están pasando muy mal». Extendió la felicitación a todos los componentes de su equipo que «han estado de chapeau» después de trabajar en la fase final para echar abajo cualquier intento de escapada.

En su opinión, el final de San Lorenzo de El Escorial es «más duro» que el de las Eras del Chaparral jiennenses, porque «no deja coger el ritmo. Por eso decidí venir a verla para estudiarla y, cuando me sentaba en el sillín, era porque venía un falso llano y había que aguantar». Ni su equipo ni él se van a obsesionar con el jersey rojo, porque «lo importante es tenerlo el último día, además sé que lo perderé casi seguro en Salamanca».

Igor Antón se declaró «contento, porque necesitaba una actuación como ésta y estar cerca de los primeros es muy importante para coger moral. Las primeras etapas se me han hecho muy duras, complicadas y ha tocado sufrir. La Covatilla es un puerto muy duro del que guardo buenos recuerdos, y me gustó cuando se subió en 2006, pero tras haber ganado dos etapas y vestirse de rojo el favorito es Joaquim Rodríguez».

Christian Prudhomme, director del Tour, se mostró sorprendido también por el ambiente: «Ha sido un final increíble, con muchísima gente en las cunetas. La llegada con esas cuestas me recordaba a San Francisco. El ambiente y el paisaje ha sido precioso durante toda la etapa: un lago y Madrid de fondo. Me ha impresionado. Ha sido un gran día para el ciclismo».

El histórico ex ciclista Federico Martín Bahamontes también conocía el terreno: «No era una novedad para mí este final. Conozco este lugar y se lo dije a Joaquim esta mañana -por ayer- en la salida, que no podía perder. Era muy adaptado a sus características. No es un escalador para las montañas duras, pero sí un ciclista perfecto para éstos finales tan cortos y explosivos».

Vincenzo Nibali, cuarto en la general, reconoció el mérito del catalán: «No quiero poner ninguna excusa. No estaba al cien por cien y no ha tenido nada que ver la caída de Talavera. Purito ha sido el más fuerte y ha ganado de forma clara, ha sido el mejor en la subida. Sabía que iba a perder tiempo en este tipo de llegadas». Ahora sólo piensa en recuperarse para la contrarreloj de Salamanca.