Turquía imputa a los kurdos una explosión mortal en el centro económico de Ankara
El Gobierno turco puso punto final a los momentos iniciales de confusión y no dudó en calificar la explosión, que causó al menos tres muertos, en el barrio comercial de Kizilay, en Ankara, como un atentado. Tampoco dudó en imputárselo a la guerrilla kurda del PKK.
GARA | ANKARA
Tres personas murieron y 15 resultaron heridas en una explosión en el centro económico de Ankara, capital política del Estado turco.
La explosión se produjo en torno a las 8:30 de la mañana en el barrio comercial de Kizilay, en el corazón de la ciudad y frecuentada cada día por decenas de miles de personas.
La deflagración tuvo lugar cerca de una oficina gubernamental y de una escuela primaria donde se impartían la clases y fue atribuida inicialmente a la explosión de una bombona de gas, aunque el Gobierno turco se apresuró a asegurar que estaríamos ante un atentado y a apuntar a la responsabilidad del movimiento kurdo.
La confusión se alimentó con las declaraciones de un testigo, que aseguró haber visto que una bombona de gas ardiendo usada para cocinar fue lanzada al suelo desde el edificio y fue a estrellarse contra un automóvil propulsado por gas licuado.
El gobernador, alcalde de Ankara y viceprimer ministro turco, Besir Atalay, quien alimentó en un primer momento la confusión al asegurar que no había ninguna víctima mortal, señaló que «si se elimina la hipótesis, bastante remota, podemos decir (definitivamente) que fue un ataque terrorista».
De visita en Alemania, el presidente turco, Abdullah Gul, no dudó en calificar la explosión como un atentado «terrorista perpetrado por gente inhumana», en referencia a los kurdos.
Un microbús
Esta tesis fue abonada por la fiscalía antiterrorista de Ankara, que aseguró que se trató de un artefacto explosivo colocado en un microbús y cuya deflagración provocó el incendio de seis vehículos cercanos.
El PKK, sobre el que ya comenzaron a recaer las acusaciones, ha negado siempre responsabilidad alguna en ataques y atentados en zonas civiles y pobladas. Algunos de ellos han sido reivindicados por los Halcones para la Libertad de Kurdistán (TAK), que según ankara no sería más que una marca del PKK para no tener que reivindicar atentados con coste en vidas humanas civiles.
El PKK insiste oficialmente en que los TAK estarían formados por elementos incontrolados que desertaron de sus filas.
La explosión coincide con las crecientes amenazas por parte de Turquía, que amaga con una incursión terrestre en Kurdistán Sur (en territorio formalmente iraquí), contra las bases de la retaguardia del PKK, que durante el verano ha incrementado sus ataques contra los ocupantes.
Tres kurdos fueron detenidos ayer en Marsella (sudeste del Estado francés) en una redada contra el PKK. La ciudad mediterránea es escenario habitual de operativos anti-kurdos a cargo de la Policía francesa
El presidente turco, Abdullah Gul, tuvo que retrasar un discurso el pasado lunes en una universidad berlinesa por una amenaza de bomba que resultó ser falsa. En Berlín vive una importante comunidad kurda.