José Ignacio Munilla y su vicario general se enfrentaron con el Consejo Pastoral
A.G. |
«Triste, lamentable, doloroso, amargo, desesperanzador y preocupante por la sima, cada vez más pronunciada, abierta entre un grupo importante de cristianos y la jerarquía que dice representarlos», es la valoración que hace el colectivo Cristianos de Gipuzkoa de la tensa reunión que mantuvo el sábado pasado el Consejo Pastoral.
Una mayoría de los componentes censuró que el plan pastoral quinquenal haya sido elaborado sólo por el obispo, José Ignacio Munilla, «sin contar con la anuencia de los miembros de la comisión permanente, elegidos para este cometido». A este planteamiento, el prelado respondió, según explicaron, «que es función suya y solamente suya la elaboración de planes pastorales», negando la posibilidad de que en la Iglesia católica se establezcan prácticas democráticas, ya que «es jerárquica».
Desprecio a Setién
En las intervenciones de Munilla y de su vicario general, Joseba González Zugadi, según algunos de los asistentes, se utilizó «un lenguaje irónico y de mal gusto» diciendo que escuchar a los miembros del Consejo Pastoral era «algo de tiempos de don José María Setién».
El grupo Eutsi Berrituz leyó un comunicado en el consejo en el que se aludió a «la falta de transparencia» en la elaboración del plan pastoral, lo que motivó una nueva intervención del vicario general, que los presentes aseguran que fue «poco respetuosa» y dio origen a una nueva crítica.
«Les rogamos que sean más respetuosos con todos, y en todos entran los miembros de las diferentes comunidades que no están de acuerdo con ustedes», les dicen este grupo de cristianos a Munilla y González.