La falsa polémica levantada a cuenta de la aparición del nombre de Larraitz Ugarte, portavoz de la Diputación de Gipuzkoa, en el Boletín Oficial del herrialde quedó zanjada ayer con su comparecencia en comisión, en la que reiteró las aclaraciones dadas primero en una nota y luego en rueda de prensa.

Tras escucharle, los diferentes grupos dieron por buenas las explicaciones; el diputado de Política Social, Ander Rodríguez, recalcó que no se ha producido ningún fraude; y el diputado general, Martin Garitano, reiteró su confianza total en Ugarte. Mientras tanto, la portavoz del PSE, Rafaela Romero, que ha llevado la voz cantante en esta campaña, matizó que se había limitado a preguntar por el tema y que sólo quería que la portavoz lo explicase.

Ugarte compareció ante la Comisión de Reglamento, Instituciones y Gobierno de las Juntas, a petición propia y del PSE, sobre la percepción de unas ayudas sociales para las que cumplía los requisitos preceptivos en la fase inicial, pero que luego han derivado en la demanda de devolución de una pequeña parte. Se trata de 5.664 euros que Larraitz Ugarte explicó ayer que ya ha reintegrado esta misma semana.

Expertos ya han explicado que es un ajuste habitual y que no supone que se haya producido fraude alguno. Sin embargo, el hecho de que el nombre de Ugarte apareciera en el Boletín Oficial al no haber sido localizada por algún error administrativo dio pie a que se desatara esta campaña de desprestigio.

Ugarte denunció ayer con contundencia la situación en que se ha visto envuelta, y admitió su incomodidad por «haber tenido que hacer un streap-tease de mi vida personal» para explicar aspectos como que recibió las ayudas porque tenía una hija a su cargo cuyo padre estaba en la cárcel en ese momento.

Agradecimiento

La diputada trasladó a los grupos junteros el expediente de solicitud de estas prestaciones, así como sus contratos como profesora en la UPV-EHU y toda la información referente a este caso, algo que agradecieron tanto PNV como Aralar, PP y Bildu.

Larraitz Ugarte incidió en su enfado por haberse convertido en «protagonista de este teatro» y censuró que «una mentira bien puesta mucho vale y poco cuesta».

Por su parte, Garitano reclamó a Romero (PSE) que retire sus afirmaciones sobre que a la portavoz «le han pillado» en este asunto, porque «se pilla a quien comete deliberadamente una infracción», algo que no ha ocurrido. Frente a ello, la portavoz del PSE se escudó en que Ugarte «no estaba localizable y no arregló este tema cuando tenía que hacerlo». Además, defendió que «sólo estoy haciendo mi trabajo» y dijo que no pedirá perdón por haber alentado el caso.