La que ha liado Jes�s Eguiguren. Se le han echado al cuello casi todos sus compa�eros de partido, tanto los de aqu� como los de allende el Ebro. El que esto suscribe no tiene �fuentes cercanas� a nada, lo cual no quita para que se atreva a exponer su propia percepci�n del asunto. Al fin y al cabo, las tertulias y las columnas de opini�n est�n repletas de recogedores de r�banos por las hojas.

Al tema. En el PSE no quer�an ir a la Conferencia de Aiete ni de co�a. Lo dijo el lehendakari y lo dijo Arriola. Pero hete aqu� que posteriormente Eguiguren, que sab�a lo que se coc�a, defendi� que hab�a que ir y que si no lo hac�an como partido lo har�a �l a t�tulo individual. Ante esa tesitura, el partido pens� que era mejor atarle en corto y, reculando, decidi� acudir con sus propias siglas con Totorika como �carabina�, no fuera a ser que el de Aizarnazabal se desmandase.

Lleg� la Conferencia, la declaraci�n redactada por Kofi Annan y compa��a -que por mucho que se les insulte siguen siendo gente con poder y buenos contactos- y la comparecencia de una izquierda abertzale que declara lo que llevaban d�cadas exigi�ndole que declarase. Todo esto, que entraba dentro de las previsiones de cualquiera que siga m�nimamente la pol�tica vasca, le pilla al lehendakari de gira en Estados Unidos tecleando su iPhone.

Y Eguiguren ve que el pa�s se les va de las manos y que no s�lo se van a llevar un hosti�n electoral de ag�rrate y no te menees, sino que adem�s la mayor�a de la sociedad vasca suscribe todos los puntos de la Declaraci�n de Aiete, no s�lo el primero, y est� cansada de que le sigan toreando, faltando al respeto y hundi�ndola econ�micamente. Harto de que no le hagan caso, Eguiguren se pega la gran rajada contra L�pez y en defensa del lehendakari sale hasta Felipe Gonz�lez diciendo que �nadie se achicharr� m�s que nosotros con las dem�s fuerzas democr�ticas�. El verbo elegido, por cierto, es bastante desafortunado y huele a hiel en boca del ex presidente espa�ol. No s� por qu�, pero cuando le� sus palabras me vino a la cabeza la canci�n de Kortatu �Hotel Monbar�.