Bildu llevará la problemática del amianto al pleno del Ayuntamiento de Bilbo y pedirá hacer un inventario
Juanjo BASTERRA | BILBO
El grupo municipal de Bildu del Ayuntamiento de Bilbo ha presentado la moción de la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi (Asviamie) al pleno de este viernes. En la misma se demanda, entre otras cuestiones, la elaboración de un inventario de edificios susceptibles de contener amianto, así como ayudas municipales para llevar a cabo el desamiantado.
Txema Azkuenaga, portavoz de Bildu, se reunió ayer con representantes de Asviamie, a quienes les comunicó que ha presentado para el pleno del viernes la misma moción que registraron el pasado 3 de agosto y cuya discusión en pleno fue rechazada por el equipo de Gobierno del PNV.
Once fallecidos
Según los datos ofrecidos por Asviamie, desde 2008 hasta este mes, han fallecido 65 trabajadores por diferentes tipos de cáncer derivado por el contacto con el amianto. Este año suman ya 11 trabajadores y, en el caso de Bilbo, destaca el vecino de la capital vizcaina Cosme Real Merino, ex electricista del BBVA, que trabajaba en la sede central del banco en Gran Vía 1. También anunciaron que en el Hospital de Basurto se ha producido un caso de placas pleurales, que responde al contacto con el amianto.
La iniciativa de Asviamie se trasladó en verano a 38 municipios de Bizkaia para hacer frente al amianto que se encuentra en una gran variedad de instalaciones. En el encuentro entre Asviamie y Bildu celebrado ayer en Bilbo, indicaron que están apareciendo mujeres de trabajadores que manipularon amianto contagiadas por el mineral cancerígeno.
Por otro lado, la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha revocado una sentencia del Juzgado de lo Social que obligaba a Mutua Asepeyo a pagar las contingencias de enfermedad profesional del autónomo Conrado Lizarralde, que falleció el año pasado por un mesotelioma, un tipo de cáncer por haber estado en contacto con el amianto. En principio, la mutua tenía que pagar los costes de la enfermedad profesional, pero la sentencia lo rechaza, porque «no ha contado con testigos que establecieron que trabajó con amianto».