Triunfo del Caja Laboral Baskonia en la segunda jornada de la Euroliga
El Cantu resiste hasta que Teletovic se pone las pilas
Doce puntos del bosnio en el último cuarto lograron que el Baskonia descolgara a un rival muy incómodo.
CAJA LABORAL BASKONIA 81
BENNET CANTU 69
Arnaitz GORRITI
En el contexto de un mal partido, el Caja Laboral Baskonia logró derrotar al Cantu en la segunda jornada de la Euroliga en el grupo A. Los gasteiztarras sufrieron mucho más de lo esperado -desde luego, la diferencia de valoración, 103-58, nada tiene que ver con la realidad- ante una escuadra italiana que se mantuvo pegado como un sello a los de Ivanovic hasta el arranque del último cuarto. Las faltas personales -fruto de un arbitraje bastante casero, la verdad sea dicha- y un espectacular arranque anotador de Mirza Teletovic, que anotó 12 puntos seguidos en los primeros compases del cuarto final -incluido un mate tremendo culminando una penetración-, fueron los verdugos del Cantu.
El duelo comenzó muy torcido para los baskonistas. No tanto por el marcador, ya que Kevin Seraphin mostró sus buenas maneras en ataque para dar las primeras rentas, sino porque Reggie Williams debía ser ingresado por una gastroenteritis.
Pero los locales se mostraron demasiado intermitentes en el desarrollo de los períodos. La defensa gasteiztarra, por ejemplo, permitió encajar 27 tantos en el primer cuarto, con el ex baskonista Micov campando a sus anchas sin que San Emeterio lograra pararlo. Asimismo, jugadores como Scekic o Marconato hacían mucho daño gracias a su brega bajo canasta.
El primer amago de escapada baskonista llegaría con el segundo período. Milko Bjelica, que poco a poco se está asentando como un jugador válido, y Nemanja Bjelica, que aprovechó bien la ausencia de Williams y el mal partido de San Emeterio, llevaron el duelo a un ilusionante 40-33. No obstante, un tiempo muerto del entrenador italiano, Andrea Trinchieri, bastó para que el Cantu lograra forzar el empate en el marcador a la altura del descanso: 44-44, y mucha preocupación dentro y fuera de la pista.
Ganar desde la solidez
Antes de la arrancada final de Teletovic, el Baskonia debía afianzar su juego, sobre todo en defensa. Así, Heurtel, Oleson y Ribas, o el propio San Emeterio, respondieron mejorando en facetas defensivas, robando balones y cazando rebotes, logrando un 7-0 de parcial al inicio del tercer período. Sin embargo, una vez más, la escuadra transalpina supo detener la sangría y, a base de jugar con Micov y la buena aportación de Shermadini, logró nivelar el encuentro.
Por fortuna para el Baskonia, este nuevo acercamiento del Cantu se llevó a cabo a costa de cargar a sus hombres, principalmente a sus interiores, con faltas. Así las cosas, se notó la ausencia de gente como Marconato y Scekic cuando los gasteiztarras, de la mano de un inspirado Teletovic, volvieron a la carga nada más iniciarse el último cuarto. Asimismo, el Cantu perdió a Basile, que sufrió un tirón en el muslo, de modo que también se quedaba sin su experto en «imposibles».
Entre el ala-pívot bosnio y los tiros libres que logró forzar el Baskonia, la renta llegaría a los diez puntos, facilitando un final de partido más plácido.
Se notaba tan aliviado como cansado a Pablo Prigioni al final del partido, después de haber sufrido más de la cuenta ante un Cantu que definió como «un equipo muy serio que no hace tonterías». El de Río Tercero achacó a las «demasiadas ganas» la poca continuidad de los suyos, aunque subrayó que fueron «construyendo» el partido hasta «buscar el momento» en el cuarto final.
«No ha sido fácil. Veníamos de hacer un mal partido en casa; teníamos demasiadas ganas de hacerlo bien y de ganar este partido, algo que a veces te juega malas pasadas. Pero bueno, fuimos construyendo el partido hasta esperar el momento, a ver si podíamos abrir un poco el marcador y cerrar los últimos minutos con comodidad», dijo.
«Por suerte apareció Mirza -Teletovic-, con un par de canastas importantes y, unido a unas buenas defensas, pudimos abrir un poco el marcador», añadió.
Preguntado sobre la imposibilidad de despegarse del rival en los tres cuartos anteriores, el base recalcó que «el Cantu juega muy serio, con posesiones largas, lo cual dificulta abrir el partido». A. G.