La NBA y jugadores volverán a verse las caras en un juzgado, después de las sendas demandas interpuestas por los profesionales en los juzgados de distrito de California y Minnesota.

En California los demandantes fueron Carmelo Anthony, Chauncey Billups, Kevin Durant, Leon Powe y Kawhi Leonard, y en Minnesota fueron Caron Butler, Ben Gordon, Anthony Tolliver y Derrick Williams los que llevaron a cabo tal acción.

David Boies, el abogado contratado por el recién disuelto sindicato de jugadores para organizar la estrategia judicial, declaró que «creemos que la vía correcta para reparar los daños a los jugadores es pedir a los propietarios que paguen por ello. Y ya que, según las leyes antimonopolio, tendrían que pagar el triple de los daños causados». Pese a esta demanda, Boies admitió que «esperamos que no sea necesario ir a juicio».

«Boicot» de la liga y los dueños

La elección de los juzgados donde se han presentado las querellas no se ha dejado al azar. El tribunal de distrito de Minnesota ya falló a favor de una asociación de jugadores de la NFL en una demanda contra la liga en los años 80, mientras que California es considerado uno de los estados más favorables a los derechos laborales de los EEUU.

El concepto más novedoso es el de «boicot». «La NBA y sus equipos han acordado negar a los demandantes la posibilidad de proveer y/u ofrecer sus servicios en en la mayor liga profesional a través de un boicot conjunto y un arreglo de precios ilegal. El propósito es reducir los salarios y coaccionar a los jugadores de la NBA para aceptar una nueva serie de onerosas restricciones en el mercado de jugadores», reza la demanda.