Homenaje del día de Nafarroa
UPN, PSN y PP rinden honores a las FSE sin ningún reproche
Yolanda Barcina les atribuye el «fin del terrorismo» en un acto en el marco del Día de Nafarroa al que no acudieron ni Bildu ni Nafarroa Bai ni I-E. Evitan cualquier petición de explicaciones por sus actuaciones en el herrialde en estos últimos 50 años, que se han cobrado numerosas vidas.
Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
El Gobierno navarro engalanó ayer el Salón del Trono para rendir homenaje a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a los miembros de la judicatura por su labor contra ETA. Yolanda Barcina hizo entrega de varios escudos de Nafarroa a los dirigentes de los distintos cuerpos policiales: Guardia Civil, Policía española, Policía Foral y a las policías municipales de Iruñea y Tutera, que acudieron al acto en uniforme ceremonial.
A un lado del salón se sentaron las autoridades y, justo enfrente, víctimas de ETA. La bancada reservada a las autoridades tuvo ausencias notables, puesto que ni Bildu, ni Amaiur, ni NaBai ni la diputada de Geroa Bai hicieron acto de presencia, al igual que I-E. Sólo Amaiur y Bildu habían anunciado en prensa su ausencia, y de hecho no había sillas para ninguno de los electos abertzales.
Por contra, sí que tomaron asiento personajes de renombre de la derecha navarra, como Jaime Ignacio del Burgo, quien anda bastante desligado de la vida política y no tiene cargo alguno en la actualidad. Pese a todo, se entiende que recibió invitación, como también debió recibirla el Arzobispado, dado que había un alzacuellos cerrando el triángulo de estamentos en el Salón del Trono.
Dentro de la protocolaria ceremonia, resultó significativo que el primer cuerpo en recibir un cuadro con el escudo de Nafarroa fuera la Guardia Civil, y es que a día de hoy sigue vivo el proceso judicial contra cuatro de sus agentes acusados de torturar a los navarros Igor Portu y Mattin Sarasola. Sin embargo, de los discursos que ofrecieron Barcina y su segundo, Roberto Jiménez, se desprende que ayer no era día para la autocrítica. «ETA ha sido vencida porque ustedes han hecho extremadamente bien su trabajo», dijo Jiménez.
Barcina recurrió a un discurso más emotivo, poniendo nombre a prácticamente todos los muertos que ha dejado la acción armada de ETA. Ni una menos, pero tampoco ninguna más. Barcina se detuvo en el primero y en el último de los agentes muertos en el herrialde: el policía español Joaquín Imaz y el guardia civil Diego Salvá. «Su único delito fue ser pamplonés, navarro y español y lo mataron por dedicar su vida y su trabajo a servir a España», proclamó.
Por parte de los homenajeados tomó la palabra el jefe superior de la Policía española, José Luis Gago Cea, quien se supeditó a las autoridades navarras y, fundamentalmente, a la Constitución. Dijo sentirse querido y cercano a las instituciones navarras. También tomó la palabra el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Nafarroa, Juan Manuel Fernández. Usó el euskara para saludar y despedirse.