Bildu de Lemoa da por zanjado el asunto del txoko «clandestino» de Zubisiku, aunque puntualizó en el pleno informativo celebrado el miércoles en el Consistorio algunas de las explicaciones dadas por el PNV, que no les convencen y estiman que siguen ocultando información y prácticas irregulares del pasado.

El portavoz de la coalición soberanista, Aitor Erauskin, achacó a los jeltzales que digan que se construyó ese «lugar de reuniones con cocina» para mantener encuentros con representantes de empresas e instituciones, cuando al acceder a la Alcaldía se han encontrado «con enormes facturas de lujosos restaurantes que responde al mismo cometido; alrededor de 39.000 euros el año pasado, y de 14.235,38 euros hasta mayo de este año».

Esta información, al igual que las reflexiones efectuadas en la sesión plenaria del miércoles, van a ser difundidas en la localidad a través de un buzoneo que va a llevar a cabo Bildu en su política de transparencia.

Erauskin recordó a los ediles del PNV que ellos también se reúnen, pero desde junio no han gastado un euro en ese concepto. Además, dudan de que el lujoso equipamiento del txoko hubiera costado 7.000 euros, como explicaron los jeltzales, aunque reconoció el edil independentista de izquierda que no hay facturas, algo que resulta muy difícil de creer tratándose de una institución pública y del dinero de todos los ciudadanos.

Ocultamiento

El portavoz de Bildu insistió en que el txoko descubierto en el pabellón de la brigada municipal de obras era «clandestino», ya que pocos vecinos lo conocían, a pesar de que el PNV diga lo contrario. «Dicen que `decenas' de personas conocían su existencia: políticos, empresarios y trabajadores municipales. Nos parece que `decenas' en un pueblo de 3.000 habitantes es tenerlo bastante oculto. Dicen -añadió- que la llave siempre ha estado en manos de empleados municipales», algo que tampoco han podido confirmar en el Ayuntamiento.

«Dicen esperar que nuestro equipo de gobierno utilice el txoko para reuniones que sean para el bien de Lemoa. Debemos responderles -dijo Erauskin- que nosotros no necesitamos ningún txoko para trabajar por Lemoa, nos basta con las instalaciones municipales que todos conocemos».

Bildu estima que es «difícil» poner el txoko de Zubisiku al servicio del pueblo «debido a su situación irregular y a las características de su acceso». A pesar de ello, siguen buscando soluciones e informarán a los vecinos de los pasos que den.

Después del revuelo que se ha creado en este municipio de Arratia tras el descubrimiento del txoko en el antiguo pabellón de Wolko, Bildu quiere dar por zanjado el asunto para dedicarse a pleno rendimiento a los grandes retos que tiene Lemoa. Pero insistieron en su objetivo de ser transparentes.