«El topo» se mueve por el lado más sombrío del cine de espías
El cineasta sueco Tomas Alfredson debuta en el cine anglosajón con una nueva adaptación de la novela de John Le Carré «Calderero, sastre, soldado, espía», llevada a la televisión en 1979 por el gran artesano John Irvin. El actual reparto no tiene nada que envidiar al anterior.
Mikel INSAUSTI | DONOSTIA
Esta nueva adaptación de la novela de John Le Carré «Calderero, sastre, soldado, espía» se justifica porque nunca antes había sido llevada a la gran pantalla. John Irvin la hizo en 1979 para la televisión, habiendo quedado como una de las mejores series inglesas de todos los tiempos, que ya es decir. Alec Guinness hizo una antológica creación del agente George Smiley, encabezando un memorable reparto, en el que también destacaban Ian Richardson, Alexander Knox, Ian Bannen y Patrick Stewart.
La película de 2011 tenía la obligación de superar a aquel reparto tan recordado, lo que ha conseguido reuniendo a lo más granado del cine inglés actual. Al frente un recuperado Gary Oldman, que hace el papel de su vida, secundado por John Hurt, Colin Firth, Toby Jones, Tom Hardy, Ciarán Hinds, Mark Strong o Benedict Cumberbatch. Un plantel estelar que ha tenido en contra frente a sus predecesores el contar con menor espacio de tiempo para desarrollar los personajes, toda vez que la película dura poco más de dos horas mientras que la miniserie duraba cinco horas. Y ahí es donde entra el cineasta sueco Tomas Alfredson, estimulado por el desafío de contar más con menos.
Alfredson tiene la oportunidad de debutar con éxito en el cine anglosajón, tras darse a conocer internacionalmente con la película sueca «Déjame entrar», una obra maestra pero que se movía dentro del género fantástico, con una historia romántica que poca relación puede tener con el cine de espionaje representado por «El topo». No obstante, en su atípica película sobre vampiros se apreciaba un cuidado especial en el diseño de los personajes, que por fuerza ha de multiplicar ahora ante una galería mucho más extensa y de carácter coral.
El artífice de «Déjame entrar» aplica a la novela de Le Carré su estilo oscuro y austero, pero profundizando en el trasfondo humano que se vivió durante la Guerra Fría. En el mundo cerrado del espionaje nadie confía en nadie, por lo que la lealtad es cuestionada y la traición impone un panorama desolador. El solitario George Smiley se verá sometido a un proceso de grandes decepciones, hasta el extremo de que descubrirá que ni siquiera su jefe le defendió en vida, cuando él siempre mantuvo una fidelidad a prueba de bombas. Nadie como John Hurt para encarnar a Control en los flash-backs que recuerdan su relación con el protagonista.
Dirección y guión: Tarsem Singh.
Producción: Mark Canton, Gianni Nunnari y Ryan Kavannaugh.
Intérpretes:
Henry Cavill, Mickey Rourke, John Hurt, Stephen Dorff, Freida Pinto, Luke Evans.
Música: Trevor Morris.
País: EEUU, 2011.
Duración: 110 minutos.
El solitario George Smiley se verá sometido a un proceso de grandes decepciones, hasta el extremo de que descubrirá que ni siquiera su jefe le defendió en vida, cuando él siempre mantuvo una fidelidad a prueba de bombas.
Dirección: Tomas Alfredson.
Guión: Bridget O'Connor y Peter Straughan, sobre una novela de John Le Carré.
Intérpretes: Gary Oldman, John Hurt, Colin Firth, Toby Jones, Ciarán Hinds, Tom Hardy, Mark Strong.
País: Inglaterra, 2011.
Duración: 127 minutos.
Título original: «Don't Be Afraid of the Dark».
Dirección: Troy Nixey.
Guión: Guillermo del Toro y Matthew Robbins, sobre un argumento de Nigel McKeand.
Intérpretes: Katie Holmes, Guy Pearce, Bailee Madison.
País: EEUU, 2010.
Duración: 99 minutos.