Primarias en la oposición venezolana
Capriles será el adalid de la oposición para arrebatar el poder a Chávez
El gobernador de Miranda, Henrique Capriles, cumplió con las expectativas que le situaban como favorito en las elecciones primarias de la oposición en Venezuela y se ha convertido en el candidato que se enfrentará, el 7 de octubre, al presidente, Hugo Chávez, que aspira a un nuevo mandato. Capriles, que evitó la confrontación con el mandatario bolivariano durante su campaña, apeló a la unidad al asegurar que los venezolanos «están agotados de la división».
GARA | CARACAS
El ganador de las elecciones primarias de la oposición venezolana, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, aseguró, tras conocer su victoria, que «el futuro de Venezuela» fue el vencedor de la cita electoral que le convirtió en el contrincante opositor de Hugo Chávez en los comicios presidenciales del 7 de octubre. Capriles obtuvo el 63,9% de los votos, en una jornada electoral organizada con el fin de superar la división que caracterizó la participación de la oposición en los comicios en 2006.
El nuevo líder de la oposición, representada en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que aglutina a 29 partidos, apeló a la unidad y reiteró que «no es la hora ni de la izquierda ni de la derecha» sino «la hora de Venezuela», porque «los venezolanos están agotados de la confrontación, de la división».
Aclaró que no es un «mesías» y, ante el inminente aumento de la popularidad de Chávez, tuvo que admitir que le queda un largo camino y que tendrá que «trabajar muy duro» para poder derrotar al actual presidente.
El candidato opositor evitó durante la campaña atacar directamente a Chávez para no granjearse la enemistad de las clases populares y se alejó del discurso agresivo de otros líderes de la oposición, pero en su primera rueda de prensa, ayer, le retó a no usar dinero público en la campaña electoral, y afirmó que no busca ningún debate con el actual jefe del Estado.
Preguntado si reconocería el posible triunfo de Chávez, Capriles declaró que el resultado será «el que el pueblo exprese», y sentenció: «el que gane ganó, para saber ganar hay que saber perder». Sin embargo, afirmó que los resultados electorales deben ser sometidos a auditorías «y revisar todo el proceso».
Capriles, de 39 años, pertenece a la clase alta caraqueña y desciende de una familia de propietarios de medios de comunicación, por lo que sus apellidos están asociados al poder empresarial aunque haya tratado de desvincularse de una imagen elitista o poderosa para tratar de captar las simpatías de las clases más desfavorecidas.
Abogado y cofundador del derechista Primero Justicia, trata de explotar su carácter conciliador, pero fue acusado de liderar el ataque contra la Embajada de Cuba en Baruta, donde era alcalde, en abril de 2002, durante el golpe de Estado contra Chávez. Estuvo en prisión, pero fue absuelto.
En 2008 fue elegido gobernador de Miranda y un año después, acusado por estafa y corrupción por su gestión como alcalde de Baruta, por lo que recibió una inhabilitación administrativa, informó Telesur.
Encuestas previas a las primarias de la oposición daban al presidente, Hugo Chávez, el 50% de las preferencias, mientras que Henrique Capriles se quedaba con apenas el 30%
El presidente venezolano, Hugo Chávez, apeló al patriotismo de la clase media, base principal de los opositores. «La clase media venezolana, definitivamente, tiene que ser patriótica, porque la burguesía casi terminó con ella, como casi terminó con la patria», destacó en la conmemoración del Día de la Juventud. Esta celebración juvenil coincide anualmente con el aniversario de uno de los hechos más significativos de la lucha por la independencia, la Batalla de la Victoria, en el Estado de Aragua, en la que José Félix Ribas, al mando de estudiantes y seminaristas, consiguió derrotar al Ejército colonialista en 1812.
Con esta efeméride como telón de fondo, Chávez, que el día 2 cumplió 13 años en el poder, incidió en que «la independencia es la condición primera y esencial para impulsar el proyecto de desarrollo integral de la nación». «No podemos aceptar que Venezuela vuelva a perder la independencia que obtuvimos en estos últimos 13 años de batalla», advirtió.
«Por ello -añadió-, me comprometo y los comprometo a que ganaremos las elecciones del 7 de octubre para llevar adelante el plan socialista de la juventud». Prometió «seguir viviendo y luchando cada día más para construir la patria grande del siglo XXI».
No dudó de que Venezuela será una «potencia» en la región latinoamericana, por lo que, consideró imprescindible «tomar conciencia del proceso que vive el país» y no dejar perder los logros obtenidos con la independencia, en alusión a una posible victoria de Henrique Capriles. GARA
