Aralar escogió el domingo, un día poco habitual para convocar ruedas de prensa, para dejar muy clara su posición sobre el debate abierto en el jueves en el Parlamento de Gasteiz y que evidenció diferencias en su grupo parlamentario. Lo hizo además con un documento escrito y que fue leído por sus tres máximos dirigentes actuales: Patxi Zabaleta, Dani Maeztu -además parlamentario en Gasteiz- y Rebeka Ubera.

El escrito despeja cualquier duda al respecto: Aralar «apoyará iniciativas incluyentes, integradoras, que no sean excluyentes, con la participación de todas y de todos». Por contra, considera que «si el diálogo no es incluyente, y si los pasos no los damos entre todos y todas, las iniciativas que se pueden realizar no tienen futuro, y no ayudarán a construir una paz verdadera».

¿Significa esto que Aralar se desmarca completamente de la ponencia que trasladó Patxi López? Dani Maeztu matizó que en realidad fue su partido quien llevó el debate al pleno de Gasteiz, porque el planteamiento que se iba a votar era el suyo y no el de López, meramente expositivo por ahora. Pero acto seguido dejó claro que si hay exclusión a la izquierda abertzale, «Aralar no va a participar en eso y no va a facilitarlo».

Como quiera que EA también ha marcado esta posición, López solo podría conformar esa ponencia con PNV, PP y UPyD, y su efectividad para aportar algo positivo quedaría ya completamente descartada de entrada.

La posición puesta en negro sobre blanco por la dirección de Aralar supone en la práctica una corrección a la postura sostenida en el pleno por Aintzane Ezenarro, su portavoz parlamentaria, dado que esta sí abrió la puerta a una ponencia sin la izquierda abertzale argumentando que así «también se puede avanzar».

Preguntado por estas divergencias, Zabaleta no las negó y optó por utilizar el humor: «Como partido democrático que somos, tenemos diferencias, pero no tan grandes como PP y PSOE, que son más partidos más grandes y a los que también queremos alcanzar». Ya en serio, aseguró que en Aralar hay «unidad ideológica» en torno al objetivo de «un final dialogado y sin exclusiones». El documento leído ayer deja sentado en su primer párrafo que «para la construcción de una paz sin vencedores ni vencidos, para que sea una paz que no tenga vuelta atrás, los pasos debemos darlos todas y todos conjuntamente, sin exclusiones».

Zabaleta espera cambios

No obstante, el coordinador general de Aralar dijo ver algo positivo en todo este debate: que ya ningún partido cuestiona la necesidad de diálogo, algo que sí era norma extendida «hace dos e incluso un año. Hoy no ocurre así, porque la sociedad no lo toleraría. Lo que ocurre es que le quieren poner condiciones a ese diálogo».

En consecuencia, auguró que «las condiciones que se ponen hoy tampoco se podrán sostener dentro de un año» y que ese diálogo acabará produciéndose.

Destacó el caso de Nafarroa, donde Aralar planteó una propuesta de diálogo abierto «desde UPN hasta Batasuna». Zabaleta saludó que «todas las fuerzas políticas nos han respondido», incluida UPN a través de una carta, según reveló.

Respecto a la fórmula de Gasteiz, Maeztu matizó que la ponencia como tal es una herramienta válida en la medida en que permite que «tengan participación también los que no están en el Parlamento». Sin embargo, remarcó que en el pleno quedó claro que «el objetivo de algunos es que eso no sea así» y que en consecuencia Aralar no asumirá un foro con vetos.

El documento presentado por el partido como hoja de ruta concluye definiendo cinco pasos que Aralar cree que se deben dar, «siguiendo el Acuerdo de Gernika y la Conferencia de Aiete». Por este orden, pide que el Estado español cambie «de raíz» la política penitenciaria; que Madrid y París respondan positivamente a la Conferencia de Aiete «para que todas las consecuencias del conflicto sean resueltas»; que se deroguen «las leyes, actuaciones y tribunales de excepción, para que todas las organizaciones sean legalizadas» y se libere a los encarcelados por hacer política; que se promueva y desarrolle el diálogo sin exclusiones, «abierto y mirando a la sociedad vasca»; y que en las instituciones se articulen «iniciativas incluyentes para promover y desarrollar la convivencia basada en el respeto y ayudar en la construcción de la paz».

Permach critica a PSE y PNV

Mientras tanto, Joseba Permach intervino en el acto que la izquierda abertzale realiza anualmente en Aritxulegi, donde también censuró las iniciativas enfocadas a la «exclusión» y auguró que no servirán de nada.

Permach dijo que es «grave» que Patxi López quiera avanzar hacia la resolución desde esos parámetros, y consideró aún «más grave» la labor de «muleta» que cree que el PNV está ejerciendo al respecto.

En su intervención, explicó que la izquierda abertzale da la bienvenida a «los foros de convivencia que buscan la solución democrática al conflicto», pero que estos «en ningún caso se pueden sustentar en planteamientos excluyentes como el de esta semana» en Gasteiz.

Así, consideró que propuestas como las debatidas ahí (el discurso del lehendakari por un lado y la enmienda transaccional finalmente no votada, por otro) «no han estado a la altura de las circunstancias», y más aún en una semana en que «ETA mostraba su disponibilidad al Estado francés para entablar negociaciones y conversaciones».

«Esta nueva fase política exige planteamientos sin ningún tipo de exclusiones, actitudes responsables y comprometidas en la búsqueda de una solución democrática», destacó Joseba Permach en Oiartzun.

Completamente al margen de este tema, Permach fue preguntado por la presentación de la iniciativa ``Ezkerretik Bildu'' en Altsasu, con una posición crítica respecto al modelo de conformación de la suma de fuerzas soberanista. La estima «positiva», como «todo lo que sea abrir el debate entre los sectores soberanistas y de izquierdas». Y le anima a «fortalecer la apuesta» política actual de este ámbito.

Ha añadido que en el acto de Alsasua había personas adscritas a la antigua Batasuna y a otros ámbitos soberanistas y de izquierdas, por lo que espera que entre todos se puedan "abrir los debates que sean necesarios con el fin de fortalecer la apuesta de la izquierda abertzale", la de "crear un gran marco y un gran movimiento soberanistas y de izquierdas capaz de abordar los retos del país".