Las organizaciones ecologistas de Gipuzkoa se han reunido en dos ocasiones con los representantes de la Dirección General de Montes y Medio Natural de la Diputación foral -con Julian Unanue y el diputado Jon Uriguen, respectivamente- con el fin de abordar «la dejadez para con la conservación natural, la desaparición de los bosques naturales y la grave situación de la vida salvaje», un escenario que a su juicio se agravó «en tiempos del PNV». Según una nota difundida por catorce grupos naturalistas y ecologistas, ven que existe riesgo de que se margine la conservación natural. Por eso, han solicitado a la institución pública a que se reúna con ellos «con la periodicidad adecuada».

Entre las peticiones realizadas, destaca la de «dejar de lado la política forestal que ha supuesto la artificialización de los montes y la plantación de miles de hectáreas de especies exóticas con el único fin de producir madera, además de acabar con la política impuesta por el lobby forestal». Por ello, piden que no se financie con dinero público estas actuaciones, particularmente las plantaciones de pinos así como las matarrasas que se llevan a cabo para su explotación o las fumigaciones que se realizan, dirigidas a dichas plantaciones.

En esas conversaciones con los representantes políticos se ha realizado un análisis sobre los nuevos retos, como la conservación de la biodiversidad, la conservación activa del medio natural o la participación pública continua, creando el Consejo Territorial de la Biodiversidad.

También han puesto sobre la mesa la importancia de impulsar una gestión moderna de los Montes Públicos, espacios naturales protegidos y de la Red Natura 2000. «En Gipuzkoa hay 88 espacios declarados Monte Público, 19 de la Red Natura 2000, 4 parques Naturales, 2 Biotopos Protegidos», recuerdan.

Criterios técnicos

Para que todo lo expuesto sea efectivo, y poner freno a la perdida de biodiversidad, los grupos ecologistas consideran imprescindible «concretar los criterios técnicos y científicos, limitando los intereses y la capacidad de gestión directa de la que han disfrutado los citados lobbys forestal y de cazadores hasta la fecha».

A la espera de una respuesta por parte de la Diputación, en la nota solicitan que se tome en consideración «a los que tenemos otro punto de vista sobre la conservación de la biodiversidad. Nuestro interés, al contrario que la de esos lobbies, es colectivo, ya que nuestro objetivo es la defensa del patrimonio natural de todos».