La familia baskonista saltó de alegría al conocer el regreso de uno de sus hijos pródigos: Andrés «Chapu» Nocioni. Sin embargo, la excitación de la noche del viernes ha de dejar paso a la realidad, un día a día que dice que a partir de las 18.00 -sin televisión; ojo con el adelanto horario para aquellos que piensen acudir a Zurbano- llega un Asefa Estudiantes muy necesitado. Los del Ramiro, que vienen de caer ante Bilbao Basket, ocupan la penúltima plaza liguera con solo siete victorias.

Por su parte, después de la exhibición ante Unicaja, intentará amarrar otro triunfo fácil ante la escuadra madrileña, por mucho que Dusko Ivanovic hallara numerosos motivos para quejarse del bajón defensivo de sus muchachos ante los malagueños y haya hecho hincapié en en que «debemos mejorar en todos los aspectos».

El preparador montenegrino destacaba de los del Ramiro, «pese a su mala clasificación», a los nuevos fichajes: Lofton, Deane y Kirskay, que «les están funcionando», amén de la vuelta al equipo de Carlos Jiménez tras haber vuelto a los entrenamientos durante la semana.

«Con Trifón Poch, un especialista en equipos ACB, han ganado confianza. Además, siempre que un equipo cambia de entrenador, está muy fuerte el primer mes y además se están jugando mucho», añadía el de Bijelo Polje.

Obviamente, no estará aún Nocioni, aunque la batería de aleros y ala-pívots -el jugador de Santa Fe viene participando en esta posición en los últimos tiempos- debería sobrarse ante un Estudiantes muy necesitado de triunfos, y que no gana en Gasteiz en Liga regular desde el 25 de enero de 2004.