GARA > Idatzia > Euskal Herria

Malestar entre los habituales del Pagasarri a causa de los controles de la Guardia Civil

Se suceden las quejas de personas que tienen en el macizo del Pagasarri un espacio de esparcimiento por el incremento de agentes de la Guardia Civil, que hostigan a los montañeros con controles de identificación.

GARA | BILBO

El macizo del Pagasarri es para muchos bilbainos y vizcainos un espacio de esparcimiento del que disfrutar a diario o semanalmente. El pulmón verde del Botxo no es una zona paradisiaca tras las repetidas agresiones medioambientales que lleva décadas padeciendo, pero lo cierto es que son cientos las personas que habitualmente ascienden a sus cumbres, ya sea el mismo Pagasarri, Ganekogorta, Ganeta o Arnotegi, por citar algunos de los montes más frecuentados.

Periódicamente se suceden las quejas por la actitud de quienes frecuentan la zona en motos, quad y hasta en bicicleta de montaña, aunque tampoco faltan las denuncias por el «incivismo» de otros que arrojan basura. Desde hace unos años a estos casos se han unido las quejas por la presencia atosigante de la Guardia Civil, que se incrementó a raíz de las obras de construcción de la Variante Sur Metropolitana.

Las últimas denuncias tienen su origen en los controles realizados este pasado fin de semana en los accesos y en la cumbre del Pagasarri, así como en Ganekogorta.

Debido a la bonanza meteorológica, muchas personas optaron el pasado domingo por acudir a esta popular montaña y allí se encontraron con la actitud «chulesca», según algunos testigos, de los militares españoles, que identificaron a varios montañeros -algunos de ellos, familias con niños-, a la vez que procedían a su interrogatorio, preguntándoles por allegados y amigos o amenazándoles.

«Parece que algunos siguen estando anclados en el pasado. No es de recibo que vayas al monte con tus hijos y te encuentres con un control, en el que te identifican, te amenazan y amedrentan a niños y niñas pequeños. ¿Qué sentido tienen esos operativos sino es generar un estado de alarma y ansiedad? Es insoportable este estado de excepción», denunció a GARA uno de los afectados «por el celo» de los guardias civiles.

No es la primera vez que se efectúan denuncias públicas sobre estas operaciones de la Guardia Civil en uno de los últimos pulmones verdes de la capital vizcaina. Su presencia con patrols y motos en los caminos forestales que serpentean los montes del macizo del Pagasarri es habitual, en puntos como Artigas -encima de la escombrera creada tras las obras de la Supersur, en el camino a Santa Lucía-, o junto a los repetidores de telecomunicaciones de Arnotegi y Ganeta.

Habitual

En los últimos meses se vienen repitiendo a lo largo de la geografía vasca las denuncias de montañeros que se quejan por los controles de la Guardia Civil en los accesos a cimas muy frecuentadas, así como la actitud amenazante que emplean los agentes en ellos.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo