Patxi Puñal habla claro
El capitán admite que hay que hacer mucho más para ir a Europa
El centrocampista uhartearra reconoce que uno de los fallos del Benito Villamarín estuvo en que las bandas no funcionaron, «al equipo le faltó fluidez con el balón y no sacamos centros claros». Asegura el rojillo que a los árbitros «les cuesta pitar penaltis a Osasuna».
Natxo MATXIN
Patxi Puñal no es hombre que se esconda ante la adversidad. Su condición de capitán le ha obligado en más de una ocasión a aparecer ante los focos cuando la situación no era la más propicia. Y de esas ha tenido unas cuantas en las últimas temporadas. Ahora, una vez conseguida la permanencia, tampoco tuvo reparos en reconocer que, tras la derrota en el Benito Villamarín, el equipo debe hacer más fuera de casa si quiere estar en Europa el próximo año.
El uhartearra inició su alocución admitiendo que la escuadra navarra «peleó y apretó, pero para sacar puntos» lejos de El Sadar «hay que hacer más» y, a su juicio, se pecó de ser poco incisivos por las alas. «No fuimos capaces de hacer daño por banda y con eso no quiero culpar a los compañeros que juegan por ahí, sino al juego colectivo de todo el equipo, no tuvimos fluidez con el balón ni conseguimos sacar centros claros», dijo.
Aunque el rendimiento rojillo local y foráneo se puede entender como muy dispar a la vista de los números, Puñal dio a entender que no hay dos equipos diferentes cuando se juega en Iruñea o lejos de la capital navarra. «Tampoco es sencillo ganar en casa, pero lo hacemos. Por ejemplo, ante el Espanyol, hasta que Raúl García no abrió la lata con dos golazos, el partido era bastante trabado», recordó.
Tampoco ayudó la actuación arbitral en esta última jornada. A la expulsión del zizurtarra, «que puede ser si se interpreta el reglamento al pie de la letra, pero que nadie en el estadio se la esperaba», le sucedieron dos penas máximas que Ayza Gámez no señaló. «Cuesta pitar penaltis a Osasuna y al día siguiente sale mejor parado el árbitro comedido que el valiente, a este último se le machaca», indicó el centrocampista.
Pese a todos estos contratiempos, los rojillos siguen estando en la pelea por participar en competición continental, fruto de la igualdad existente en la tabla y de la irregularidad de algunos rivales llamados a estar más arriba. «Todo está muy apretado y los equipos se están acercando, pero estando bien y jugando al fútbol como sabemos tenemos todas nuestras opciones intactas», comentó el capitán osasunista.
Pese a que la competencia es muy elevada, de momento la entidad osasunista mira por el retrovisor a clubes con mucho mayor potencial económico. «Para algunos no estar el año que viene en competición europea puede suponer un gran varapalo», una ansiedad de la que podría beneficiarse Osasuna, «aunque ya veremos qué ocurre», señaló.
Y el inmediato compromiso, aunque haya que esperar más de lo normal por jugarse el lunes, es de los de cuatro puntos. Ante el Málaga, un adversario directo ahora mismo, que también pinchó en su estadio ante la Real al empatar a uno. «Ellos también tienen problemas», se refirió Puñal a este resultado, «y ya tenemos muchas ganas de jugar y ganarles».
Diferente con Nekounam o Raoul
El pivote también habló sobre las diferencias a la hora de jugar con Nekounam o Raoul Loe en el eje de la medular. Así, concedió que su papel «cambia un poco» sobre el campo según se trate de uno u otro. «Con Nekounam puedo salir un poco más a apretar, con Raoul debo guardar más la zona», aseguró.
«Son dos jugadores que van muy bien por arriba. Nekounam es más estático, pero eso lo compensa por la experiencia que lleva acumulada y por saber colocarse muy bien en el campo. Raoul es un futbolista con mayor movilidad y que debe aprender a conservar el sitio, pero tiene unas ganas enormes y va a ser un gran jugador», analizó a ambos compañeros.
Mendilibar decidió dar una doble jornada de descanso -hoy y mañana- a su plantilla, ya que la semana se va a hacer muy larga hasta la disputa del encuentro frente al Málaga el próximo lunes a las 21.00 en El Sadar.
Osasuna presentará alegaciones por la roja mostrada a Raúl García, argumentando que no fue una «patada a la altura del tobillo», como se recogió en el acta de Ayza Gámez, sino un pisotón en el talón de Jefferson Montero.
Con ello se confía en que la cartulina quede reducida a una amarilla y el de Zizur Nagusia pueda jugar frente al Málaga, aunque si nos atenemos a anteriores precedentes, no existen muchas posibilidades de que se disminuya el castigo.
Tal y como está redactado el escrito del colegiado valenciano, a Raúl García podrían caerle hasta dos partidos si se aplica el reglamento de manera rigurosa. También habrá que esperar a ver qué sanción se le impone a Javier Vicuña, entrenador de porteros, por llamarle «cagón» al linier.
Quien será baja segura para el encuentro frente a los malacitanos es Ibrahima, que viajó para concentrarse con su selección de cara al decisivo partido de repesca que enfrentará a su país, Senegal, con Omán en Coventry el mismo día 23, y en el que el ganador disputará los Juegos Olímpicos de Londres este próximo verano.
La nómina de ausencias podría incluso ampliarse, dado que Jon Echaide sufre molestias en uno de sus hombros después de recibir un fuerte golpe en esa zona. El jueves se le realizarán algunas pruebas para determinar el alcance de su dolencia. Por su parte, Marc Bertrán realizó carrera en solitario y habrá que esperar a ver la evolución de la rodilla de Sergio. N.M.