El consejero de Educación, José Iribas, aseguró ayer que en Nafarroa no se aumentaría el ratio de alumnos por aula en un 20%. Sin embargo lo hizo con un lenguaje calculado y ambiguo. El único ámbito donde se comprometió a que no se subirá el número de alumnos es en las aulas de tres años, en educación especial y en los grupos «de atención a la diversidad». Para los demás, Iribas se escudó en que actualmente la capacidad de las aulas se puede incrementar hasta en un 10% para nuevas incorporaciones y señaló que jugarán con ese margen, aunque no dejó muy claro cómo.

«Vamos a analizar caso por caso atendiendo a las circunstancias del centro y de los alumnos que lo integran», se limitó a señalar el consejero. «Si algún centro que solicita, por cualquier razón, superar esta ratio, también lo vamos a estudiar y, evidentemente, responderemos a la demanda del centro», terminó de decir Iribas, que también remarcó que son medidas de carácter «temporal» y «de obligado cumplimiento».

La apelación de Iribas a casos concretos puede deberse a que el reparto de alumnos por centro debe de estar ya avanzado, puesto que en años anteriores ya se había finiquitado por estas fechas. La distribución del alumnado por centros es una operación compleja, ya que hay algunos con sobredemanda y, por tanto, estudiantes que se reasignan a otros centros. Para ello, es necesario saber si en cada grupo habrá 30, 33 ó 35. Si no, el reparto es imposible. Con los recortes del ministro Ignacio Wert, los grupos de primaria pasan de 30 a 36 y los de secundaria de 40 a 48. El anuncio del ministro supuso la paralización de la distribución de los alumnos por centro en Nafarroa, algo que fue denunciado por el sindicato LAB. La notificación de que la distribución de alumnos se había paralizado llegó a los directores de los centros, cuya copia tiene GARA. Está fechada el día 27 de abril y firmado por la Coordinadora del Área de Escolarización, que se comprometía «a reanudarlo en breve».

Más horas y más despidos

La segunda medida de recorte en Educación es la ampliación de los horarios de los profesores en dos horas semanales. En Nafarroa llueve sobre mojado porque el presente curso ya conllevó la ampliación de una hora a los docentes de secundaria, de 17 a 18 horas lectivas semanales. Con el nuevo aumento, se pasa de 18 a 20. La cifra de despidos que supuso la ampliación del presente curso ha sido cifrada en unos 230, según los sindicatos. En consecuencia, el cálculo de pérdidas de empleo que supondrá el nuevo ajuste rondará los 460. Además, con más alumnos por clase, habrá menos grupos y, por tanto, menos profesores.