2016ko kultur hiriburuaren izendapena
Caras serias para la foto, vetos varios y un brindis por la capitalidad
Resultaba cuando menos chocante contemplar el semblante serio, casi lúgrube, con el que el portavoz municipal del PP Ramón Gómez Ugalde alzaba ayer su vaso de champán para celebrar la designación oficial de Donostia como capital cultural europea 2016 junto a la polaca de Wroclaw. Había un miedo evidente a que se repitieran los reproches mediáticos por el buen rollo de otra fecha similiar compartida con el alcalde Izagirre y de ahí su extraña actitud ante las cámaras. En la sala de recepciones del Ayuntamiento de Donostia, todo era un pulular de camisetas de la capitalidad, un cierto aire teatral cara a los medios gráficos y algunos llamativos gestos de damas heridas por no estar, se supone, en el centro de la foto.
Donostia empieza por fin ahora la que es la «carrera» hacia el 2016, después de que el Consejo de Ministros de Cultura de la UE oficializase ayer la capitalidad cultural. Una reunión en la que estuvo el alcalde Wroclaw y no el de Donostia, porque, según el ministro español de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, «no nos corresponde a nosotros hacer esto»; es decir, invitar al primer edil. Por cierto, el ministro reconoció que no ha mantenido «ningún contacto» con el alcalde donostiarra, aunque «desde luego desde el punto de vista institucional -agregó-, el Gobierno hará cuanto le corresponda hacer para que esta capitalidad cultural que ahora arranca oficialmente de San Sebastián sea un éxito».
En la capital guipuzcoana, y flanqueado por la consejera de Cultura de Gasteiz, Blanca Urgell, y la diputada guipuzcoana de Cultura, Ikerne Badiola, y rodeado también por todos los grupos presentes en el Ayuntamiento -por cierto, el PP denunció públicamente que Bildu hubiera vetado al subdelegado del Gobierno- Juan Carlos Izagirre ironizó al apuntar que «este proyecto consigue lo que otras cosas quizá no consigan, que es la unidad de todos». «Tanto en el ámbito de la cultura, para dar a conocer en todo Europa nuestra lengua y nuestra cultura, como en lo social y en lo económico. Creo que es la capitalidad un gran beneficio para esta ciudad y para este país», remarcó.