Empleados de Inasa piden a la CEN que se desmarque de las prácticas de la empresa
GARA |
Los trabajadores de la empresa Inasa solicitaron ayer a la Confederación de Empresarios Navarros (CEN) que se desmarque públicamente de las prácticas empresariales de la dirección y el accionariado de esa compañía, ya que Nafarroa «necesita empresarios dispuestos a negociar en las empresas, no contra ellas».
Así lo demandan los empleados en una carta de la que hicieron entrega en la sede de la patronal en Iruñea, lugar en el que se concentraron para denunciar la situación en la que se encuentran debido a la que consideran «intransigente y nula capacidad» de la dirección de alcanzar un acuerdo de futuro, según indicaban en la misiva.
Los trabajadores que, entre otros aspectos, reconocen que esta empresa de Irurtzun, «como muchas otras, está sufriendo una difícil situación en sus resultados derivada de la coyuntura general de crisis económica a todos los niveles», subrayan que la empresa «como única alternativa a una posible reflotación» del negocio ha aplicado «la reforma laboral en toda su crudeza».
En este sentido, denuncian que la dirección ha rebajado los salarios de los empleados a «los mínimos permitidos por el convenio del metal y nada más».
Al mismo tiempo, apuntan que se han incumplido todos los acuerdos suscritos con la parte social del convenio y «ni siquiera ha sido capaz de cumplir con lo estipulado en el artículo 41 de la nueva reforma laboral, al no atender al pago de las indemnizaciones estipuladas en el mismo».
Falta de ética empresarial
En opinión de los trabajadores de la factoría Inasa, las prácticas de la dirección en relación a distintos aspectos del convenio «se alejan de toda ética empresarial, al utilizar de forma habitual el engaño, la ocultación, la amenaza, el incumplimiento». Es por ello por lo que desean conocer la opinión de la patronal navarra sobre su situación. También quieren confirmar si en la CEN están de acuerdo con esas prácticas.
Finalmente, en su documento, los empleados de Inasa señalan que hace tiempo que supieron estar a «la altura» y por eso realizaron una «propuesta muy generosa, que habla de futuro y estabilidad en Inasa, que verdaderamente pretende preservar los puestos de trabajo y la actividad empresarial».
La empresa Inasa, dedicada al suministro de equipos y componentes eléctricos y electrónicos industriales y con sede en México, cuenta con 177 trabajadores en su planta de Irurtzun y decidió aplicarles una rebaja salarial media del 35%, motivo por el que la plantilla se mantiene en huelga indefinida.