Las estrategias frente a las amenazas de la derecha, el papel de los movimientos progresistas en América Latina, la unión entre los pueblos y la batalla por la profundización de la democracia han sido los ejes que han marcado el desarrollo del XVIII Foro de Sao Paulo, un encuentro que ha expresado su apoyo explícito al proceso bolivariano que se está desarrollando en Venezuela y ha ratificado al socialismo como alternativa al sistema capitalista neoliberal.

El Foro de Sao Paulo, celebrado el jueves y el viernes, por primera vez en Caracas, con la participación de cerca de 600 delegados de movimientos sociales de izquierda y casi 100 representantes de partidos políticos de los cinco continentes, ha dedicado gran parte de sus debates a la crisis mundial del capitalismo y sus consecuencias para los países de la región, gobernados en su mayoría por fuerzas progresistas.

«Hoy estamos superando la larga noche del neoliberalismo», declaró el secretario general del Foro, el brasileño Walter Pomar, durante el acto de apertura del encuentro.

El declive de la hegemonía de EEUU en el mundo, la crisis del modelo económico neoliberal, el renacimiento del socialismo y la llegada al poder de partidos progresistas y socialistas fueron citados por Pomar como las claves del cambio que ha protagonizado América Latina desde que en 1990 tuviera lugar el primer encuentro de la izquierda en Sao Paulo.

Advirtió a los izquierdistas latinoamericanos y caribeños de que aún queda mucho trabajo por delante en materia de «igualdad, democracia y justicia social» y alertó de que los cambios alcanzados en estos ámbitos, a los que contribuyó el propio Foro, están siendo amenazados por la crisis mundial, los «errores» de la izquierda y la contraofensiva de la derecha, que al no lograr victorias en las urnas, «apela a los viejos métodos del golpe de Estado», en referencia a lo ocurrido en Honduras y Paraguay. Expresó también el respaldo de la izquierda regional, cuyas distintas visiones han confluido en el Foro, al proceso bolivariano, una referencia necesaria para los reunidos en Caracas, y al presidente Hugo Chávez -cuya presencia se esperaba ayer en el acto de clausura - en la batalla electoral de este año.