El Gobierno de Ollanta Humala autorizó ayer la entrada e intervención del Ejército en la región de Cajamarca, declarada en estado de excepción, para tratar de poner fin a las protestas en la zona tras la muerte de cinco personas durante las manifestaciones contra el proyecto minero Conga, informó Telesur.

Personalidades de la política y sectores de la sociedad han criticado duramente la actuación del Ejecutivo de Humala ante un conflicto que comenzó en noviembre cuando se anunció el proyecto de la mina de oro de Conga que afectará irremediablemente, según sus opositores, a las reservas de agua. Estos exigieron ayer al Gobierno que anule el proyecto después de la muerte de cinco manifestantes en enfrentamientos con la Policía.