Christopher Froom (Sky), ganador de la séptima etapa, aseguró que el obejtivo de la jornada no era su victoria parcial, sino conseguir que su compañeros Bradley Wiggins se vistera de amarillo. «No estaba previsto que yo buscara la victoria de etapa, pero vi que podía intentarlo y que no había ningún riesgo para Wiggins, así que me lancé al sprint», explicó el corredor.

Asimismo, valoró positivamente el trabajo de su equipo: «Richie Porte ha hecho un trabajo formidable toda la ascensión, ha puesto un tren infernal y ha provocado muchos daños, eso ha hecho mi trabajo más fácil, he podido intentar algo en los últimos metros».

Pese a su segunda plaza en la Vuelta del año pasado, Froome precisó que no tiene intención de discutir el liderato del equipo Sky a Wiggins. «El plan es claro, Bradley es el líder. En el futuro podremos pensar en venir a una vuelta como líder, pero no ahora», sentenció.

Precisamente Bradley Wiggins (Sky) afirmó estar «sorprendido» de no haber recibido ataques de sus rivales en el ascenso a La Planche des Belles Filles. «Hemos marcado el ritmo ideal para el ascenso, lo esencial era no perder tiempo con Cadel (Evans). Me ha sorprendido que sólo fuéramos cuatro en el final, pensé que llegaríamos unos quince», señaló el británico.

«Creo que soy una persona afortunada. El año pasado a estas alturas estaba en el hospital de Chateaurroux tras sufrir una caída y hoy estoy aquí vestido de amarillo», recalcó.

Cadel Evans (BMC), segundo de la etapa y de la general, indicó que «Froome ha rodado verdaderamente fuerte y ha controlado el ascenso. Traté de anticiparme en la última curva, antes de meta para tomar impulso pero no ha sido posible. Froome ha tenido piernas para ganar y Wiggins, con el equipo que tiene, es difícil atacarle».

Rein Taaramae (Cofidis) también estuvo entre los corredores de cabeza y, aunque al final cedió algo de terreno, recalcó que «el objetivo es el maillot blanco, pero ahora que me encuentro bien no renuncio a nada. Me he preparado muy bien para esta carrera. Es bueno haber aguantado con los mejores».

Entre los nuestros, destacó Haimar Zubeldia (Radio Shack), el mejor corredor vasco en la general. El de Usurbil indicó que «el ritmo del Sky ha sido muy fuerte. Tienen grandísimos corredores y el ritmo era inaguantable. El tour solo ha empezado y lo importante es que estemos ahí. Fabian (Cancellara) con las cronos que hay es nuestro líder del equipo, y junto a Frank (Schleck), vamos a ir día a día».

Vincenzo Nibali (Liquigas) se mostró contento por haber estado entre los mejores y de «cómo ha quedado la carrera» tras la primera prueba de montaña. «Ha sido un bonito test, sobre el papel la subida parecía más fácil, pero el ritmo del Sky ha sido muy fuerte. Al final tenía intención de sprintar pero cuando me di cuenta había cedido 10 metros que ya me impidieron la salida para disputar la etapa», señaló el Tiburón de Messina.

«El Sky ha hecho una gran carrera y ha hecho una gran selección. Estoy satisfecho porque el equipo ha trabajado bien llevándome delante por una carretera en mal estado», finalizó.