Para venir a sanfermines hay quien opta por ponerse sus mejores galas. Echan el resto para acercarse a una fiestas sin igual. Como en cualquier evento que se precie, los complementos son los que marcan la diferencia. Pelucas, sombreros, gafas de sol, turbantes... todo sirve para estar elegantes. Aunque algunos tienen que conformarse con menos, ya que alcanzar la elegancia es un objetivo que se antoja imposible. Con estar presentables ya es suficiente y para algunos incluso esta meta es una utopía. Unos optan por estilos más innovadores y desenfadados. Otros, se inclinan por lo más tradicional. Echar un vermú y ver desfilar a los improvisados modelos no tiene precio. Para que luego digan de la Pasarela Cibeles o la Semana de la Moda de Milán.