Amanece, que no es poco, y los noticiarios de la fachenda hablan de la valoración que realizan ciudadanos españoles sobre políticos de otros países. Según el noticiario o «parte de guerra», del resultado obtenido se desprende que Evo Morales, la presidenta argentina Kirchner, Chávez, entre otros, son los peor valorados.

Está claro que desde la lejanía y con la incapacidad mental que se potencia en el país vecino, los ciudadanos ven allá aquello que no quieren ver en lo más cercano, puesto que con 5.000.000 de parados, un 25% de paro, millones de personas en extrema pobreza, bancarrota, corrupción... no creo que sea conveniente opinar sobre lo desconocido y sí sería conveniente, por lo menos, valorar lo que mejor se conoce o padece.

El mismo día a distinta hora, leo un comentario cuanto menos igualmente ridículo, absurdo y del mismo tinte ideológico, por parte de un político «nacionalista» que vive y se siente a gusto en Madrid, sobre Laura Mintegi.

Por lo que leo, me consta que desconoce quién es, pero tal vez el acelerón mental y miedo que sufre ante las próximas elecciones en este trozo de Euskal Herria, y porque el negocio de siempre se le tambalea, le ha llevado a opinar sobre alguien a quien ve como competencia. Qué pena que el Rey, la Monarquía y aquello que le lleva al show mediático, no ofrezcan, por lo visto, más noticias que explotar. Por lo menos sería más cuerdo al opinar y tendría contentos a los del partido.

Lo dicho, la ignorancia es atrevida, osada, cruel y se ve en el ajeno lo que uno no se ve en sí mismo y lamentablemente les lleva a aparecer en medios que potencian el populismo y el enfrentamiento, no ideológico sino el más bajo y chabacano.

De los primeros «expertos evaluadores», solo querría saber cuál es el criterio seguido para evaluar y cuáles las fuentes informativas que alimentan la opinión: ¿Los medios de ultraderecha habituales? ¿La FAES? ¿La opinión dada por supuestos expertos, que ni siquiera saben quiénes son los odiados personajes?... ¿Saben por ejemplo, quién es Evo? ¿Repetirían la broma de la llamadita pretenciosa realizada sin ningún respeto, cuando fue elegido democráticamente como presidente de su país? ¿Se permitirían estas opiniones, por ejemplo, sobre el Rey, Rajoy, Aznar, Rubalcaba... sin citarlas como amenazas? No lo creo.

De sus iguales «nacionalistas vascos», solo esperaba como mínimo cordura y no alinearse con la fachenda. No se puede valorar a quien no se le permite defenderse. No se puede seguir el guión preestablecido del desgaste, solo por empatía, de los voceros de un sistema corrupto, como el español. Y personalmente creo que no es serio.

Y puestos a la misma altura de idiotez, cuando hablan de que la candidata Laura ha sido seleccionada a dedo, me surge la memoria histórica que recuerda la cantidad de decisiones y situaciones que ellos mismos han decidido no solo a dedo, sino que incluso por encima de la ley y sin ningún contraste de opinión popular. Sin citar las obligaciones con decisiones judiciales que han incumplido, por ejemplo, con un chalet en Urdaibai, canteras, etc. El ejemplo lo debe dar quien valora a otros.

La osadía e ignorancia puede ser válida para crear opinión interesada, pero la verdad no está relacionada con la opinión parcial, sobre todo cuando lo que se pretende es destruir a una persona de la que simplemente se desconoce todo.

Veamos por tanto el programa que defiende cada cual y la coherencia que se tiene, del resto sobra comentarios y faltan circos y pinturas para que actúen ante sus fieles seguidores.

De momento me quedo con el silencio de los que no han respondido a semejantes opiniones, porque no pueden o no quieren estar al mismo nivel. A todo esto, zorionak Arnaldo!!!