EEUU relaja las sanciones sobre Myanmar para allanar el terreno a las empresas
GARA | WASHINGTON
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, decidió el miércoles rebajar las restricciones a las empresas que hagan negocios en Myanmar «de forma responsable», al tiempo que advirtió de las consecuencias para aquellos que no apoyen el camino de las reformas iniciadas en Rangún.
«Estados Unidos rebaja las restricciones para permitir a las empresas estadounidenses que hagan negocios de forma responsable en Myanmar», indicó Obama en un comunicado, en el que renovó su apoyo a las reformas para acabar con el aislamiento de Myanmar.
«Rebajar las sanciones es una señal firme de nuestro apoyo a las reformas y proveerá de incentivos inmediatos a los reformadores y beneficios significativos al pueblo birmano», aseguró el presidente.
Las empresas estadounidenses están interesadas en que esta apertura alentada por las reformas democráticas iniciadas por el presidente birmano, Thein Sein, y que han devuelto la libertad a la líder opositora Aung San Suu Kyi, les permita inciar inversiones en los sectores de gas y petróleo.
El presidente Obama recordó, no obstante, que «las reformas económicas aún siguen sin completarse» y que EEUU está preocupado por «la falta de transparencia en el ambiente inversor de Myanmar y por el papel de los militares en la economía».
Reacción de la oposición
El partido de la opositora Aung San Suu Kyi saludó ayer el aligeramiento de las sanciones de EEUU sobre Myanmar, pero emitió una cierta reserva sobre su llamamiento a la «transparencia» de las inversiones, autorizadas en lo sucesivo.