Insiste el Partido Popular, en relación con la situación del preso enfermo Iosu Uribetxebarria, en que no se va a dejar influenciar por el `chantaje' de otros presos etarras y su huelga de hambre y, sobre todo, que en este caso se va a limitar a `cumplir la ley'. Para ello, han llevado a cabo pruebas médicas a Uribetxebarria con el fin de certificar su estado médico terminal. Las resistencias que, de forma bastante evidente, está ofreciendo la Administración, dirigida por el PP, en el caso de Uribetxebarria choca bastante con otro caso aparentemente similar ocurrido unos años atrás: el del general Rodríguez Galindo después de su condena por el asesinato de Lasa y Zabala.

Rodríguez Galindo, tras su condena firme, accedió de inmediato al tercer grado, de manera que sólo tenía que dormir en la cárcel, lo cual hacía en la zona VIP y en condiciones que ya quisiéramos muchos tener en un hotel. A los pocos meses, Rodríguez Galindo era puesto en libertad en aplicación de ley para casos de enfermedades terminales. Desde entonces, el buen general subsiste con una mala salud de hierro (...).

¿Cuál es la diferencia en ambos casos? Que en la, digamos, `democracia española', con perdón, las torturas y los asesinatos sólo son delitos dependiendo de quién y contra quién se cometan. Por lo que se ve, si los comete un guardia civil en su empeño por salvar a la patria, un par de asesinatos no sólo no merecen el castigo supuestamente recogido en la Ley, sino que concitan la complicidad de muchos, a muchos niveles, para que su actuación no sólo no tenga castigo, sino recompensa. (...)

Antonio Basagoiti, presidente del partido de Rajoy en la CAV, teme que, si no se alcanza un pacto entre la mayoría de los partidos vascos, en especial su partido con PNV y PSOE, para establecer «una respuesta clara y contundente, que ponga en mayúsculas el compromiso y el avance que ha logrado la sociedad vasca», de cara a las próximas elecciones autonómica pueden acabar `triunfando' aquellos que han hecho `que se desande el camino hecho' y pretenden «someter» al conjunto de los vascos a un proyecto de «independencia obligatoria».

Dejemos una cosa clara. Si esos `malvados' a los que se refiere Basagoiti acaban `triunfando' en las próximas elecciones, será porque han recibido el correspondiente apoyo, en forma de votos, de una parte sustancial de los ciudadanos vascos. Se llama `elecciones libres' y se llama `democracia'. (...).